En la Legislatura aguardan definiciones de la Casa de Gobierno para saber si convocan mañana a una sesión especial, en medio de la expectativa por la asunción de Juan Manzur como nuevo jefe de Gabinete de Ministros de la Nación y de las tensiones por el orden de sucesión en el Gobierno provincial.
En principio, en el jaldismo esperaban que el titular del Poder Ejecutivo (PE) enviara una nota para solicitar una licencia especial en el cargo. Esa había sido la vía escogida en 2009, cuando Manzur, entonces vicegobernador, había requerido -y obtenido- un permiso de la Cámara provincial para ejercer como ministro de Salud de Cristina Fernández de Kirchner.
Sin embargo, hasta pasado el mediodía, el escrito no había ingresado por la mesa de entradas del edificio de Muñecas al 900.
Según fuentes del manzurismo, en el espacio del gobernador analizan la posibilidad de que, en lugar de una nota, se firme un decreto de necesidad y urgencia (DNU), con la rúbrica de todos los ministros.
Este instrumento, si bien puede ser convalidado o rechazado por el cuerpo colegiado, no puede ser modificado.
Esta alternativa surgió mientras la Casa de Gobierno busca posicionar al legislador Sergio Mansilla, jefe del bloque "Lealtad Peronista" de la Legislatura, como sucesor provisorio de Manzur en el Poder Ejecutivo. El dirigente de Aguilares, cercano al ministro del Interior Miguel Ángel Acevedo, fue ratificado anoche por el propio gobernador en una cena que mantuvo junto a diputados nacionales, funcionarios provinciales, legisladores e intendentes de su espacio.
Para que eso suceda, en el Gobierno provincial confían en que los llamados de Alberto Fernández y de otros referentes nacionales, como Sergio Massa y Aníbal Fernández, lograrán torcer la decisión del vicegobernador Jaldo de hacerse cargo de la Provincia, tal como lo dispone la Carta Magna.
Para ello, habrían "tentado" al tranqueño con un cargo de relevancia en el Banco Central, además de la posibilidad de la Secretaría de Asuntos Municipales de la Nación, que depende del ministro del Interior, Eduardo "Wado" De Pedro.
Además, para que Mansilla llegue a la presidencia subrogante de la Legislatura y se ubique en el orden de sucesión de la Provincia, ese lugar debería ser liberado por el legislador Regino Amado, uno de los hombres del entorno de Jaldo.
Son horas clave en el oficialismo tucumano. Y las definiciones deben llegar pronto, dado que Manzur viaja esta tarde rumbo a Buenos Aires y mañana debe prestar juramento junto al resto de los nuevos funcionarios de Alberto Fernández.