18 Septiembre 2021
TRASLADO. Nueve de los 19 acusados cordobeses fueron trasladados en medio de un fuerte operativo.
“No es la primera ni de la última banda de estafadores cordobeses con epicentro en alguna cárcel de la provincia. El ‘call center tumbero’ es un eslabón central para que Córdoba se haya convertido en la capital nacional del cuento del tío”, sostuvo el editor de la sección Policiales del diario “La Voz” Juan Federico en una nota.
El periodista, en base a la detención de sus comprovincianos, indagó sobre el tema en esa provincia. Según pudo averiguar, existirían al menos tres “empresas” que se dedicarían a cometer este tipo de estafas en todo el país.
Los roles son varios: unos crean los perfiles falsos en redes sociales o crean el ardid para estafar; otro llama por teléfono, obtiene datos sensibles de la víctima, para que algún otro miembro tome control del home banking ajeno. A partir de ahí se realizan transferencias y se requieren créditos que también son transferidos de inmediato. El dinero va a parar a cuentas creadas o utilizadas a tal fin por otros miembros de la banda y luego se repartía el producido.
“Es la nueva salida laboral en algunos barrios. Hay varias mujeres que tienen los maridos presos que están chochas, ahora facturan más que cuando están en libertad”, declaró un informante del diario cordobés. Ese medio da cuenta que las cárceles son las bases de operación de estas organizaciones. Y que por ese motivo, pagan hasta $30.000 para que terceros les ingresen celulares en las unidades penitenciarias.
El 4 de agosto, sólo tres semanas antes de los operativos ordenados por la Justicia tucumana, fue una comisión de policías de Chubut la que arribó a la provincia de Córdoba. Perseguían la pista de unas 10.000 estafas cometidas desde esta provincia con víctimas desparramadas en diferentes puntos del país.
“La banda opera desde Córdoba, está comprobado, muchos damnificados, miles. Por el informe que tenemos se habla de más de 1o.000 causas”, indicó a la prensa el subjefe de la Policía de Chubut, Néstor Gómez. Y apuntó: “Se va a destapar una olla importante con muchas personas vinculadas y muchos damnificados”.
Distintas modalidades
- A través de llamadas teléfonicas, argumentando que ganaron un premio importante, le piden los datos personales y de sus cuentas bancarias.
- También con llamadas telefónicas mintiendo sobre la tramitación de subsidios, planes sociales, reintegros impositivos y ajustes salariales, les piden a las personas que se dirija a un cajero para que gestione una nueva clave que ellos utilizarán.
- Envían mails “truchos” que no son otra cosa más que un programa que permite a los estafadores quedarse con los datos de las personas que caen en la trampa.
- Crean perfiles falsos en Facebook, Twitter e Instagram de bancos ofreciendo productos. Los desprevenidos acceden a recibir un llamado de un supuesto operador del banco que se queda con todos sus datos personales.
- Fingiendo ser compradores, se aprovechan de la confianza de los vendedores de cualquier artículo para quedarse con sus claves.
- Utilizando dispositivos especiales, empleados de comercios infieles clonan la tarjeta de créditos de los clientes. Luego venden esos datos para que otros realicen compras.
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