El presidente, Alberto Fernández, finalmente anunció su nuevo gabinete, que estará bajo el mando del gobernador, Juan Manzur.
El movimiento abre un interrogante obvio: ¿el vicegobernador, Osvaldo Jaldo, se hará cargo del Poder Ejecutivo provincial?
El artículo 91 de la Constitución de Tucumán así lo determina. "En caso de muerte, renuncia, enfermedad, ausencia u otro impedimento del Gobernador, sus funciones serán desempeñadas por el Vicegobernador hasta el cese del impedimento, cuando fuese temporal, o hasta completar el período constitucional por el que fueron electos, cuando el impedimento fuese permanente", comienza diciendo el largo. artículo en cuestión. Sin embargo, nada está dicho.
Desde la mañana circularon versiones que lo ubican a Jaldo en el directorio del Banco Nación. Los laderos del tranqueño confirman, en off, que el presidente de la Legislatura no dejará la provincia.
En medio de todo, resta un paso ineludible que tendrá a jaldo, y a los jaldistas parlamentarios, como protagonistas: la Legislatura debe aprobar la licencia de Manzur para que este pueda mudarse a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a ocupar el cargo de jefe de Gabinete. Así ocurrió en 2009, cuando el gobernador -por entonces, segundo de José Alperovich- solicitó licencia para hacerse cargo del Ministerio de Salud de la Nación.