“Los cuatro de Inglaterra decidimos venir por el amor a la camiseta”, explicó Emiliano Martínez. “Dibu” fue uno de los cuatro jugadores al que las autoridades brasileñas quisieron sacar de la cancha del Arena Corinthians cuando apenas se habían jugado algunos minutos del clásico Sudamericano Brasil-Argentina.
El arquero “albiceleste” regresó al país junto a toda la delegación tras la convulsionada visita a Brasil e inmediatamente -y autorizado por el cuerpo técnico de la selección- emprendió viaje hacia Croacia, donde hará el aislamiento para reincorporarse ya en Inglaterra a su equipo Aston Villa. “Después de ganar la Copa América todos queríamos estar y asumimos las consecuencias”, agregó Martínez.
El héroe de la semifinal que Argentina le ganó por penales a Colombia pensará dos veces la próxima vez que una convocatoria se realice y en el medio esté un protocolo sanitario que lo afecte directamente. Por considerar que la nación de la cual proviene forma parte de la “lista roja” pandémica, según la legislación brasileña, debía realizar un aislamiento de varios días. Lo pensará doblemente, pero su proceder, seguramente, será el mismo por el intenso sentimiento que tiene hacia los colores argentinos. “Nos hubieran avisado y no hacían tanto quilombo para cancelar el partido”, agregó el marplatense que le puso tintes “políticos” a la suspensión, antes que razones de salud.
Martínez, como su compañero Emiliano Buendía y los jugadores de Tottenham, Giovanni Lo Celso y Cristian Romero, se fueron de Inglaterra a pesar de la decisión de los clubes de la Premier League de no ceder futbolistas sudamericanos. A éstos dos últimos, “el amor por la camiseta” les costaría una multa económica, según publicó el diario Daily Mail; ese trascendido es uno de los motivos por el que el cuerpo técnico nacional los liberó.
Lionel Scaloni también pensará más de una vez la próxima lista de convocados en pandemia. Hará quizás como Tite, el DT brasileño, que había citado a nueve jugadores de la Liga inglesa, pero viendo lo que se gestaba, optó por prescindir de ellos.
La FIFA recibió ayer los primeros informes, aseguró en un comunicado la entidad madre del fútbol mundial, como así también indicó que la resolución del partido que tiene status de “suspendido” será “a su debido tiempo”.
En un esfuerzo por encontrar algo positivo en el escándalo futbolístico de escala mundial están las palabras de Gianni Infantino, el presidente de la FIFA. La convivencia fútbol-pandemia y los intereses que hay de por medio son temas a tratar, más aún luego del caso Brasil-Argentina. “Es loco (lo que pasó) pero necesitamos tratar con estos desafíos, superar estas crisis de la covid-19. Y esto es porque necesitamos su comprensión y colaboración”, pidió Infantino en la Asamblea General de la Asociación de Clubes Europea, en Suiza. La audiencia que escuchaba el video de Infantino estaba formada precisamente por representantes de los clubes que se opusieron a ceder jugadores. “Necesitamos repensar el calendario y para hacerlo necesitamos buena voluntad de todos”, pidió. El directivo insistió en que el operativo para lograr el equilibrio hasta que la pandemia termine, sólo puede lograrse entre todos. “Es un tiempo difícil y les estoy pidiendo que intenten mantenerse juntos por algunos pocos meses más y con suerte luego esto terminará”, anheló Infantino.
PÍLDORAS SUDAMERICANAS
Ventas de entradas
Al cierre de esta edición se iba a anunciar el Decreto de Necesidad y Urgencia por el que el Poder Ejecutivo Nacional autorizaría el ingreso de público en el partido entre Argentina y Bolivia. Una vez que esté publicado, la AFA comenzará con la venta de entradas. Los tickets serán 17.000 y se calcula que habrá 21.000 personas (más invitados) que deberán cumplir con varios protocolos.
Extraña acusación
La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil (Anvisa) indicó que un empleado de la AFA falsificó las declaraciones juradas de los cuatro futbolistas argentinos acusados de incumplir la normativa federal de migraciones en ese país.
Lo curioso de la denuncia fue el nombre de la persona señalada: Fernando Ariel Batista, DT del seleccionado Sub-20 y olímpico, quien no estuvo en ningún momento.
Un llamado de Bolsonaro
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, llamó por teléfono al titular de la Confederación Brasileña de Fútbol, Ednaldo Rodrigues, para ofrecer alguna salida minutos después de la suspensión, informó una fuente de la dirigencia política. El diálogo ocurrió en la zona de vestuarios y el dirigente le dijo a Bolsonaro que había sido inoportuno el accionar no habiendo detenido antes a los cuatro jugadores.