Casi cinco horas después del papelón que protagonizaron los agentes sanitarios de Brasil, el equipo argentino pudo emprender el viaje desde el aeropuerto paulista de Guarulhos rumbo a Ezeiza.
Luego de tres horas y unos minutos más respecto del momento en que se suspendió el cotejo de la clasificación continental rumbo a Qatar 2022, la delegación albiceleste dejó el estadio Arena Corinthians de San Pablo, en un micro de dos pisos de la empresa Trans Wolff.
"Nos vamos a casa", fue la frase que usó la cuenta oficial del seleccionado en las redes sociales para anunciar el regreso de los dirigidos por Lionel Scaloni.
Las autoridades sanitarias brasileñas les exigía a las personas que llegan desde Gran Bretañana (Emiliano Martínez, Cristian Romero, Giovani Lo Celso y Emiliano Buendía, entre ellos) y otros territorios europeos “una cuarentena mínima” de 14 días, a raíz de la pandemia del coronavirus.
Sin embargo, desde la AFA, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) y la propia Conmebol se argumenta que esa solicitud “no es necesaria” porque las competencias futbolísticas que se realizan en territorio sudamericano, se rigen bajo otro tipo de protocolos sanitarios.