Los principales bancos de inversión y analistas que siguen de cerca la economía argentina esperan que el dólar suba más de un 40% en 2022, de acuerdo con los datos recabados por Focus Economics en julio de este año. De acuerdo con la información difundida por este centro especializado, el dólar cerrará en $ 110 en 2021 y en $ 155 en 2022 (un alza de 40,9%). No obstante, existe una gran dispersión entre los consultados.
Las proyecciones se ubican en línea con las estimaciones de inflación para 2022 incluidas también en Focus Economics, del orden de 42% para la mediana, con máximo en 55% y mínimo en 35%. De los datos se desprende que los analistas esperan una aceleración del dólar el próximo año, en línea con la trayectoria de los precios minoristas, algo que no sucedió al menos en los primeros ocho meses de 2021. Así lo destaca el sitio de noticias especializadas BAE. Precisamente, el dólar oficial cotiza a unos $ 97 u $ 98, con un alza de 15,9% en lo que va del año, mientras los precios minoristas ya rozaron el 30% de subida a julio último, de acuerdo con los datos del Indec. La inflación de agosto registraría una leve baja, de acuerdo a consultoras citadas por LA GACETA.
Ninguno de los tipos de cambio ha subido más que la inflación este año. El dólar blue opera hoy en la zona de $ 180, con una brecha que ronda el 80 % contra la cotización oficial.
En tanto que el diario La Nación indicó en su edición de hoy los datos de agosto del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), considerada la encuesta más abarcativa de la plaza local que mes a mes lleva adelante el Banco Central (BCRA). En este último informe, la economía cerrará el presente año con un rebote de actividad hasta un punto mayor al que los analistas proyectaban hasta hace unos meses (lo imaginaban del 6% hasta mayo y ahora creen irá del 7,2% al 7,3%), pero conviviendo con una inflación que se ubicará en un rango que va del 48,4% al 48,8 %.
Con respecto al dólar y siempre según el REM, ahora creen que cerrará el año entre $105,58 y $105,75, es decir, entre $1,35 y $1,8 menos de lo que creían hasta hace un mes) y volviendo a recurrir a crecientes subsidios (que a la vez ayudaron a sostener en elevado nivel el déficit y la emisión monetaria para cubrirlo) se pagará en adelante. Finalmente, los consultados imaginan que el alza generalizada de precios volverá a trepar por encima del 3% mensual desde diciembre, y que se ubicaría entre 3,3% y 3,4% en enero y febrero (último mes pronosticado).
Por último, en agosto, los precios de los alimentos continuaron con una tendencia alcista, lo que volvería a presionar sobre la inflación y que los ubicaría nuevamente por encima del alza del nivel general del IPC. Así se desprende de un relevamiento privado (la consultora LCG), que dio cuenta que durante las últimas cuatro semanas el costo de una canasta de productos se incrementó un 3,2%.