Uber invertiría cerca de 2.200 millones de pesos en Argentina

“Tenemos el compromiso de ser parte del camino de recuperación”, dijo Felipe Aramburu, Head Regional de Uber en el Cono Sur, y anunció que este año la empresa invertiría alrededor de 2.200 millones de pesos en el país. “Vemos una oportunidad enorme en Argentina. Esta recuperación que se ve en el país nos permite pensar que se va a concretar esta inversión antes de fin de año”, agregó el joven en la conferencia de prensa.

Uber es una plataforma de tecnología que conecta a socios onductores y a usuarios. El sistema de la aplicación utiliza el GPS del teléfono del pasajero y de los conductores, lo que permite conocer las ubicaciones entre ambos mediante conexión a internet, lo que permite enviar el vehículo más cercano al pasajero.

Aramburu remarcó el rol de la empresa en el país como “generadora de oportunidades” para trabajadores y usuarios, y como compañía que invierte en el país. En la presentación digital que hizo el líder de Uber en el Cono Sur también destacó el crecimiento de la empresa en el interior del país durante el último año y medio. En diciembre de 2019 Uber era usado en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), Mendoza y Mar del Plata; desde entonces, la empresa se instaló en otras 13 ciudades, desde la capital salteña hasta Comodoro Rivadavia, en Chubut, según indicó Aramburu.

En esas 13 ciudades, además, Aramburu destacó que la gente solicitó el servicio con un crecimiento del 43% mensual. Por ello, afirmó que el objetivo de la compañía es instalarse en otras 25 ciudades durante los próximos meses.

Uber se instaló en Tucumán en octubre del año pasado. “Acá todavía está bastante ‘verde’ la cosa”, dijo Alejandro Suárez, que maneja un auto para la aplicación. Sin embargo, reconoció que desde que está disponible en Tucumán no paró de crecer.

“Si bien en este último tiempo se están agregando conductores, todavía no está la cantidad de gente que usa el servicio. Acá la gente está acostumbrada al taxi y al remise de antes. Sí los más jóvenes, que están acostumbrados a la tecnología, ya lo conocen”, explicó.

En los últimos meses hubo un aumento en la cantidad de usuarios del servicio, según el propio Suárez lo percibió en la cantidad de pedidos que recibió a través de la aplicación. “Pero no hay suficientes personas que pidan autos, para la cantidad de choferes que hay actualmente trabajando con Uber en la provincia”.

La relación entre taxistas y conductores de Uber tuvo cruces en algunas oportunidades, principalmente en Buenos Aires. Pero no es algo que Suárez haya vivido en su experiencia. “En lo personal nunca tuve discusión con ningún taxista”, afirmó a LA GACETA. “Es más, algunas veces voy a un lavadero de autos y ellos (un grupo de taxistas que también va) saben que soy de Uber. Me bajo y hablo con ellos, nos preguntamos cómo está el laburo de la semana, cuánto están cobrando por tal viaje, y todo bien. Los muchachos me conocen y nunca tuvimos problemas”. Hay, según Suárez, una transferencia de conductores que dejan sus taxis para empezar a conducir un auto a través de Uber. Por último, el chofer destacó la variación en el precio entre un medio de transporte y otro, en especial para los viajes de larga distancia, en los que esa diferencia se hace más notoria. “El Uber es mucho más barato. Un viaje que en un taxi sale $ 700, nosotros cobramos $ 500”, señaló.