Rossana Chahla se apoyó en las propuestas sanitarias

Ella se preparó para el debate como para un examen final. Y si bien no terminó con la nota máxima, sorteó esta primera exigencia electoral frente a un avezado contendiente como el vicegobernador. En la valuación, Rossana Chahla, precandidata a diputada nacional por la lista manzurista “Lealtad Peronista”, impuso para pasar la prueba “su experiencia” y conocimiento desde la medicina y como actual ministra de Salud, contra el manejo económico y estadístico del contador Osvaldo Jaldo.

Si bien la ginecóloga arrancó distendida, los minutos siguientes la pusieron nerviosa. Es que en el primer bloque sobre coparticipación, presión tributaria y subsidios al transporte no sentía que “era su terreno”, y de ahí que cayó en los sitios comunes de referenciar estadísticas, proponer convenios entre los poderes políticos para distribuir fondos, y la reforma de leyes que “deban reformarse”. Siempre convencida en acudir al federalismo y a la solidaridad como paso positivo en contra del centralismo porteño.

Y en el primer debate, propuso poner en la agenda el tema del calentamiento global, el cambio climático y contaminación ambiental que afectan la salud de la población.

En el segundo bloque miró menos el “ayuda-memoria” puesto en el atril, y más “afianzada” en los temas logró una leve ventaja sobre el presidente de la Legislatura. Sobre la reforma judicial, ella detalló que la propuesta presentada en el Congreso beneficiará a Tucumán, ya que contaría con un juzgado más, porque sólo uno de los dos actuales debe atender más de 50.000 causas. Y se agregarían dos defensorías y dos fiscalías federales.

En cuanto a la legalización del uso de la marihuana, remarcó que hay un trabajo con el Conicet sobre el aceite de cannabis, para usarlo en otras patologías, aparte de la epilepsia refractaria. Por eso, reclamó una ley que “sea más amplia” y también “bien clara”.

En cuanto a los planes sociales, respondió al disparo de Jaldo sobre que estaba en contra del pago “en el Hipódromo” o en las ventanillas de la Caja Popular. “En realidad, los planes sociales no es un invento argentino; en Inglaterra, después de la Revolución Industrial, nacieron las primeras ayudas sociales. Hoy EEUU y Europa lo tienen”. Agregó que “deben ser coyunturales”, y que en esta pandemia permitieron hacer “un control de la salud de la familia”.

En el debate planteó una reforma del sistema sanitario argentino, que está fragmentado. Delineó en la propuesta una única regulación para las obras sociales y prepagas; ampliar las prestaciones médicas obligatorias (PMO) para cuidar más a los adultos mayores, y trabajar en una historia clínica única para todo el país.

En el último bloque, negó que el gobernador quiera reformar la Constitución para una reelección indefinida y pidió crear un Consejo para atacar con la inseguridad. Finalmente, agradeció a todo el equipo de salud provincial por su trabajo en los últimos 20 meses. “Dejamos todo en la pandemia”, resaltó, y pidió que la acompañen con el voto en su incursión política.