Cómo llegan los precandidatos al debate de esta noche

¿Qué puede deparar el debate de esta noche? Naturalmente que la disputa de Osvaldo Jaldo no es con Rossana Chahla. Las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) encuentra al vicegobernador encabezando la lista de Juntos por Tucumán, mientras que la ministra de Salud Pública es cabeza de nómina de precandidatos a diputados por Lealtad Peronista. Ambos se respetan y, salvo cuestiones imponderables de la política y de las oportunidades naturales que tienen los debates, no prevén choques fuertes.

¿Por qué? La respuesta es lógica. La pelea del presidente de la Legislatura y líder de Peronismo Verdadero es con Juan Manzur; sólo con él y nada más que con él. Es al que, en estas internas, le disputará la continuidad en el cargo de gobernador, pensando en 2023. Es el que tildó de traidor a su compañero de fórmula y es el jefe de campaña que debe mostrar un triunfo rotundo en las urnas el 14 de noviembre porque ese es el compromiso que asumió con la Casa Rosada y también con el Instituto Patria. Quizás haya chicanas, como la que se menciona en Peronismo Verdadero que, pese a estar en listas diferentes para los comicios del 12 de septiembre, Jaldo y Chahla compartirán la misma boleta mirando a la pelea de fondo, la de noviembre. "Hoy estamos separados, pero quien dice que luego vamos juntos", señalan en el bunker jaldista.

Chahla debuta en compulsas electorales. Su rol estuvo más ligado a lo institucional y a lo académico que a la unidad básica. Por eso señala que no tiene militancia, pero sí trabajo dentro de la política gubernamental, con más de dos décadas de experiencia y que hoy la encuentra como ministra en un escenario de pandemia de Covid-19. Jaldo a su vez tratará de volcar toda su experiencia en debates para dominar el tablero político. Como lo hizo la ministra, el vicegobernador también aprovechó gran parte de la jornada para preparar su puesta en escena, lo que dirá esta noche desde el atril del estudio de LA GACETA. Ambos buscarán mostrarle a los tucumanos en general y a los peronistas en particular por qué sus propuestas pueden ser merecedoras del voto ciudadano para llegar al Congreso de la Nación.

La incógnita, no obstante seguirá abierta. Los tucumanos podrán sentarse a ver si el debate será de ideas, si las chicanas propias de la política rompen el hielo inicial de la discusión o si, en definitiva, se convertirá en otro capítulo de la telenovela justicialista.