¿Cuáles son los gastos de funcionamiento de la Justicia electoral en Tucumán?

Los viáticos fueron el gasto principal de funcionamiento del Juzgado Federal Nº1 de Tucumán durante las elecciones de 2019, según la rendición de cuentas publicada por la Cámara Nacional Electoral (electoral.gob.ar). La planilla revela que la unidad judicial encargada de arbitrar los comicios nacionales también hizo desembolsos para adquirir comida, agua, combustible, cocheras, bolsas, “movilidades”, pasajes de avión, útiles de oficina, etcétera. En total, el despacho que entonces encabezaba Daniel Bejas -hoy se desempeña como camarista electoral- informó que había gastado casi todo el fondo disponible: expuso que le había quedado un saldo de $ 13.820 de los 
$ 1.343.0000 (equivalentes a U$S 31.452 en función de la cotización de la divisa de hace dos años) girados por el Ministerio del Interior de la Nación.

La rendición en cuestión refiere pura y exclusivamente a la cobertura de las tareas internas en cabeza de la Justicia puesto que la adquisición de los bienes y servicios requeridos por el proceso electoral (retribución de las autoridades de mesa, logística general, seguridad, escrutinio, campaña de los partidos políticos e impresión de boletas, entre otros) tienen un financiamiento estatal específico. En 2017, y con los votos de los magistrados Alberto Dalla Vía y Santiago Corcuera, la Cámara Nacional Electoral resolvió que estos desembolsos de naturaleza judicial también sean publicitados.

La Acordada 107/2017 explicita que los gastos de funcionamiento no incluyen las remuneraciones, ni siquiera el pago de conceptos adicionales o de contratos ad hoc. “En los casos en los que se prevé́ una contraprestación, y esta consista en la transferencia de fondos para hacer frente a los gastos derivados de la realización de horas extraordinarias por parte del personal del fuero o la contratación de agentes, la prestación de servicios personales se rige según las condiciones establecidas y los valores fijados por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, para su posterior liquidación por parte de la Dirección de Administración Financiera del Consejo de la Magistratura del Poder Judicial de la Nación”, detalla el instrumento. Entre funcionarios y empleados, la Secretaría Electoral del Juzgado Nº1 de Tucumán tiene un “staff” de 50 integrantes. Entre abril y diciembre de cada año electoral, el organismo suma empleados contratados: este año convocaron a 16. La Corte estableció un número fijo de horas extra por día, cantidad que aumenta los días de votación, que, además, valen doble por ser domingo.

Acopio para la escasez

Los recursos transferidos por el Poder Ejecutivo de la Nación fueron aplicados a gastos practicados entre el 28 de junio y el 26 de diciembre de 2019. La hoja de cálculo divulgada en la web de la Cámara Nacional Electoral comienza con la rendición de una factura en el restaurante El Bodegón 
($ 2.520) y concluye con otra por agua ($ 1.320): en total, el Juzgado Nº1 presentó 287 erogaciones en el período mencionado.

Los viáticos -monto entregado para el sustento durante un traslado fuera de la sede institucional-insumieron el 63% de los egresos totales. Por este concepto percibieron sumas 35 personas, con el juez Bejas a la cabeza, quien cobró $ 355.000 (ver tabla). La planilla oficial asigna a aquel rubro gastos en el Hotel Altos de Amaicha (Amaicha del Valle) y Líquidos Geogas. En el Juzgado Nº1 explicaron que los viáticos son entregados a quienes viajan para hacer inspecciones en escuelas, capacitaciones y otras gestiones ligadas a los comicios, y anticiparon que este año, por las restricciones de la pandemia, habrá una disminución de este tipo de gastos respecto de 2019.

El rubro “otros” incluye un conjunto variado de desembolsos: desde el alquiler del salón del Tucumán Lawn Tennis Club 
($ 3.900) el 21 de agosto de 2019 hasta pasajes aéreos ($ 12.112). También hay erogaciones relacionadas con artículos de librería y de limpieza, y con servicios técnicos para escáneres. El Juzgado hizo tres gastos de “materiales eléctricos” ($ 3.200 en total). Fuera del apartado “alimentos”, en la rendición de cuentas consta un pago de desayunos por $ 1.920.

La comida ocupa el tercer lugar en la escala de gastos de funcionamiento de la estructura judicial local involucrada en los comicios nacionales. El despacho N°1 informó compras en panaderías, supermercados y una carnicería así como una “constancia de almuerzos” ($ 18.900). Fuentes del organismo comentaron que los días de la votación encargan sándwiches y empanadas que comen en las dependencias. En las últimas ocasiones se ahorraron el postre: pidieron la promoción que incluye una bandeja de masas a modo de regalo.

Los gastos de funcionamiento permiten a la Secretaría Electoral pertrecharse para los años en los que no hay comicios. “Hacemos como en el Ejército”, comparó una fuente con grandísima experiencia en esta actividad. Y añadió que el fondo recibido a propósito de las elecciones sirve para acopiar insumos de oficina y de higiene, y hacer trabajos de mantenimiento de los equipos: “después llega un bienio con una caja muy acotada”. Un símbolo de esa escasez sería la camioneta modelo 1998 asignada a la Secretaría, cuyo kilometraje y desgaste obliga a usarla sólo en la hipótesis de desplazamientos cortos y urbanos.