ATE y UPCN rechazan un posible descuento del sueldo a los estatales que no se hayan vacunado

Frente a las propuestas en otras provincias de presionar a los trabajadores estatales a vacunarse obligatoriamente para evitar descuentos salariales, en el sindicalismo tucumano consideran que no será necesaria una medida así para incentivar la vacunación de los empleados públicos.

El gobernador jujeño Gerardo Morales anunció que esta semana firmará un decreto para obligar al personal estatal a colocarse al menos una dosis de las vacunas que se aplican en el país contra el coronavirus, como requisito para poder asistir a los lugares de trabajo o brindar servicio. Quienes no lo hagan, quedarán expuestos a sanciones y descuentos salariales por inasistencia.

“Voy a firmar un decreto para obligar a todas las personas que usen el transporte público a que presenten el carnet de vacunación. Vamos a trabajar mañana y pasado mañana con las empresas de transporte público de toda la provincia para que tengan los mecanismos de control y también será con los municipios y sus agentes”, comentó Morales. Sin embargo, estarán exentos aquellas personas con orden medica de no vacunarse por algún cuadro específico.

La medida incluirá la obligatoriedad de mostrar el carnet de vacunación o el certificado de la aplicación para celulares para usar el transporte público.

En Córdoba también se anunció una medida similar: se aplicarán licencias sin goce de sueldo para trabajadores de la administración pública provincial que se nieguen a recibir la vacuna y sean mayores de 60 años o tengan comorbilidades. Julio Comello, secretario de la Gobernación cordobés, apuntó a que la medida busca el funcionamiento de los distintos niveles de la administración estatal con la mayor presencialidad posible.

En Tucumán

Funcionarios provinciales que conforman el Comité Operativo de Emergencia (COE) explicaron que no se analiza -todavía- aplicar una medida similar a la de Jujuy por la demanda de vacunas de la población. Sin embargo, prefirieron realizar las apreciaciones por lo bajo. Un punto de coincidencia en las argumentaciones apuntó al porcentaje de vacunación con al menos una dosis en la provincia: el último reporte de Salud arroja que el 75% de la población tucumana mayor de 18 años tiene al menos una dosis. La campaña de vacunación se concentra, ahora, en completar los esquemas de inmunización.

Marcelo Sánchez, titular de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), coincidió en que no será necesario adoptar una medida así a nivel local. “Creo que acá hay un alto porcentaje de personas vacunadas, de compañeros que quieren vacunarse. El problema es que estamos a la espera de que lleguen las segundas dosis, particularmente de Sputnik V. La promesa desde Nación es que agosto sea el mes de las segundas dosis, para que todas y todos completemos el esquema de vacunación y la protección frente al virus sea la máxima”, consideró el titular de ATE.

“No creo que sea necesario adoptar esas medidas desde el Gobierno, de sancionar compañeros o descontar sueldos porque todos tienen conciencia del peligro del virus y de la importancia de vacunarse. Dios quiera que no llegue la variable delta hasta que todos tengan las dos dosis”, agregó Sánchez, y apuntó contra el gobernador jujeño: “me parece que esto de Morales es porque es muy particular, no sabe cómo llamar la atención porque está en campaña. Tiene su propia interna y además quiere mantenerse en el poder como sea”.

Lucinda Espeche, titular de la Unión de Personal Civil de la Nación (UPCN), coincidió con su par de ATE en que no será necesario -al menos por ahora- imitar esas medidas en Tucumán. “Creo que todavía es muy temprano para tomar medidas de ese corte. Recomendamos en todas las reparticiones que se vacunen, hemos solicitado en otros momento que Salud incluya a más trabajadores entre los grupos considerados ‘esenciales’ que fueron vacunándose, en paralelo al rango etario. Siempre hemos tenido una buena respuesta. Es cierto que suele haber algunos rebeldes, pero trabajamos para hacerles entender la importancia de que se vacunen”, planteó Espeche.

Para la referente sindical, la preocupación del gremio apunta al cumplimiento en las reparticiones de la distancia social en oficinas. “La preocupación ahora pasa por garantizar que en toda dependencia se cumplan los protocolos, y en donde no pueda garantizarse la distancia social o la ventilación se trabaje con burbujas. También estamos atentos para que no le descuenten días a compañeros que se han contagiado o que han debido faltar por ser contacto estrecho con alguien positivo. La responsabilidad para evitar que se propague el virus no puede tener como respuesta el descuento salarial”, consideró.

En debate

El concejal David Mizrahi ha presentado un proyecto para implementar en la capital eventos de ocio con mayor aforo para personas que tengan al menos una dosis de la vacuna contra el covid-19. La iniciativa aguarda para su debate en distintas comisiones del cuerpo, tras haber recibido la semana pasada a referentes de asociaciones de empresas gastronómicas, cines y salones de fiestas, entre otros.

Aunque la iniciativa apunta al incremento de la capacidad o la extensión en el horario permitido de atención para bares y restaurantes, no descartan habilitar funciones con mayor capacidad en los cines si todas las personas han sido vacunadas.