Con el desembarco de las plataformas digitales se abrió un amplio abanico de opciones laborales. Subestimadas al principio, muchas de ellas se convirtieron en un gran ingreso económico: sobran los casos de estrellas (hasta hace poco desconocidas) que viven exclusivamente de su trabajo como influencers.
OnlyFans se presenta, en este contexto, como una opción cada vez más difundida. El sitio web brinda un servicio de suscripción de contenido, lo que en la jerga se conoce como pay per view (pagar para ver) y allí pueden encontrarse videos de artistas que producen material (fotos o videos) sólo para sus fans, como así también deportistas o influencers. Por lo que más se la conoce es por el contenido erótico que se comercializa.
Cada usuario cobra (en dólares) por el material audiovisual que produce y los interesados pagan un monto mensual para acceder a él. El precio de suscripción puede elevarse hasta los U$S50. Sí, por suscriptor y por mes.
¿Es redituable? Vamos a los hechos: Bella Thorne, actriz y ex chica Disney, cosechó U$S 1 millón sólo en su primer día vendiendo contenido multimedia en la plataforma. De hecho, rompió un récord al ganar el doble en apenas dos semanas. La rapera Cardi B también es furor en la App, pero sus producciones no son eróticas: la idea es que sus seguidores sean testigos de eventos más privados, cosas que en el día a día muestra en las redes sociales.
El fenómeno
Lo impactante es que con la pandemia su uso se extendió a todo el globo terráqueo con más fuerza y empezó a llegar a nuestro país. Poco a poco (y con memes de por medio), los jóvenes sobre todo empezaron a conocer esta plataforma por la amplitud del contenido: el comentario común, que sorprende a todos, es la venta de fotos de pies.
Lo cierto es que OnlyFans ha llegado para quedarse; desplaza a los antiguos sitios de producción y comercialización de contenido para adultos y brinda a sus creadores la oportunidad de autogestionarse y no trabajar para la millonaria industria audiovisual triple X.
Por esta y otras razones, cada vez más personas se animan, derribando tabúes y construcciones sobre el cuerpo, a iniciarse en este mundo. Pero atención: no es tan fácil ingresar. Es necesario corroborar la identidad para poder utilizarla y, en muchos casos y por causas relacionadas a los criterios de selección de OnlyFans, la confirmación que da el OK para empezar, nunca llega. Por supuesto, el sitio web necesita niveles altos de seguridad para evitar que menores o cuentas falsas inunden su sitio. En rigor de la verdad, hay quienes logran engañar al sistema y crear y vender contenido allí a pesar de no contar con la mayoría de edad. Pero esa es otra historia...
Un trabajo más
María Milagros Prieto (@crhus en la plataforma) es tucumana y desde 2021 trabaja en la App, pero aclara que también tiene otros dos trabajos. “Antes de tener OnlyFans estaba de novia, tenía una buena imagen, beboteaba (fotografiarse o filmarse en una pose sexy), subía a Instagram cosas fuertes, pero no lo monetizaba. Mis amigos me aconsejaron hacerlo; por esas fechas hice un vivo con Kevvo (cantante de rap) donde tenía que perrear. Cuando lo hacía, subían los suscriptores. Ahí empezó a gustarme más la movida”, reconoce en diálogo con LA GACETA.
“Este es un trabajo como el de modelo o vedette. Ellas muestran o modelan el cuerpo, como hago yo en OnlyFans -sigue-; es como un juego. Hay que crear contenido para mantener a la gente activa, entretenida, y hacer que quieran consumir más”.
Quienes producen material para vender en el sitio eligen, como en cualquier otra plataforma, qué es lo que desean mostrar. Esto se debe a un conjunto de variables que pueden ser los pedidos de fans, fechas o acontecimientos importantes, ¡incluso se pueden producir reality shows amateurs.
La joven, de 26 años, da un ejemplo claro: para la Copa América hizo una sesión fotográfica con la camiseta de la Argentina. “Yo cuando hago producciones alquilo un lugar tope de gama; siempre estoy buscando nuevas ideas, armando contenido diferente. Se necesita mucho tiempo y es una inversión: hay que pagar un hotel, comprar la ropa, conseguir a alguien que te grabe los videos”, añade y aclara: “cualquiera puede hacerse una cuenta, pero no cualquiera tiene seguidores que paguen por ver”.
El éxito
La también influencer -tiene ya 30.000 seguidores en Instagram de su cuenta @maria_milagros_prieto- se encuentra en el nivel siete de OnlyFans Creators, es decir, es de las preferidas en la App. Admite que se puede ganar bien y que incluso hay quienes viven gracias al dinero que reciben (del costo por suscripción, la empresa retiene un 20%).
Sus fans no solo son de Argentina, también ha cosechado seguidores en Estados Unidos y en otras latitudes. Aquí en Tucumán también es reconocida porque, a diferencia de otros creadores de OnlyFans, ella decidió que su usuario esté disponible en nuestro país; de esa forma, sus conocidos pueden saber que ella produce contenido para esa plataforma, con sede legal en Londres.