El ingenio Ñuñorco paró tres horas hasta que cumplió con una norma ambiental. La medida se concretó por orden de la Secretaría de Ambiente provincial y duró hasta que, desde la fábrica, corrigieron las falencias advertidas. Los filtros no funcionaban correctamente y al no hacerlo bien, emitían material particulado a la atmosfera.
Al mediodía, la Secretaría de Medioambiente de la provincia, dispuso el cese inmediato de la molienda en el Ingenio Ñuñorco, ubicado en la ciudad de Monteros. La medida fue cumplida durante tres horas, hasta que la fábrica puso en funcionamiento las exigencias requeridas.
A la atmósfera
El subsecretario de Protección Ambiental, Marcelo Lizárraga, explicó que los filtros no funcionaban correctamente y al no hacerlo bien, emitían material particulado a la atmosfera. El funcionario del Ministerio de Desarrollo Productivo, que conduce Alvaro Simón Padrós, confirmó el levantamiento de la medida.
Lizárraga explicó que, esta mañana, cuando se presentaron en el lugar tras las denuncias recibidas por los vecinos sobre la contaminación que estaban padeciendo por parte del ingenio, “fuimos recibidos por apoderado, Marcelo Casadey, junto a su equipo técnico, quienes convocaron a una escribana pública de Monteros para que labrara acta de las actuaciones”.
Asuntos jurídicos
En el lugar estuvieron presentes el director de Medioambiente de Monteros, Eduardo Brito; el director de Asuntos Legales local, Alejandro Ale; el subdirector de Asuntos Jurídicos de la Secretaria de Medioambiente y técnicos de la dirección de Fiscalización Ambiental.
Tras recibir la denuncia de los vecinos donde daban cuenta del mal funcionamiento de los filtros húmedos con los que deben contar los ingenios en las calderas, el subsecretario de Protección Ambiental detalló que no estaban en regla. "Pudimos comprobar que los requerimientos exigidos no estaban cumplidos en su totalidad, razón por la cual se resolvió dictar una medida preventiva, de suspender la molienda. Lo hicimos a las 12.12, exactamente, a la espera que el ingenio cumpliera con los requerimientos”.
En el trascurso de tres horas, desde la fábrica azucarera dieron cumplimiento con lo exigido, por lo que fue rehabilitada la molienda tras una nueva verificación de Medioambiente.