Crisis vial: MetaBici pide que se eduque a favor del ciclista

La trágica muerte de un ciclista en la avenida Perón de Yerba Buena, al ser colisionado por un colectivo cuyo chofer no lo vio cuando doblaba en esa arteria, puso al descubierto la desprotección que sienten quienes transitan en dos ruedas por las calles de la provincia.

El referente del colectivo MetaBici, Pablo Quiroga Curia, alertó que “es un problema mucho más grave de lo que creemos; un problema muy delicado de la ciudad de Tucumán y de Yerba Buena, donde todo es un caos”. “La calle es violenta, sumado a que el ciudadano tucumano es dañino, atrevido, prepotente... Hay una falta total de educación, una despreocupación de la gente encargada de ordenar o educar”, advirtió.

Precisamente, para revertir esa situación, en la organización civil se reivindica la educación como la principal herramienta para solucionar los problemas de tránsito, una formación que comenzaría desde los primeros años: “en MetaBici, una de las ideas básicas que tenemos es tratar de realizar un proyecto en conjunto con las autoridades para que desde el prejardín exista educación vial apostando hacia la bicicleta como medio de transporte”. “No se trata sólo del respeto a las señalizaciones o a las ordenanzas, sino fomentar el uso de los rodados para ir al trabajo o a la escuela. Así el niño empieza a respetar al ciclista, al conductor y al peatón”, sintetiza.

“Y cuando hablamos de educación desde esa instancia, no solo nos referimos a la vial. Todo lo que se le quiera enseñar a una persona hay que hacerlo a esa edad para que respete el semáforo, para que sea solidario y comprensivo con los otros ocupantes de la calle, para que respete las normas, etcétera. Indefectiblemente el Estado debe estar presente; esto no es un problema solo de Tucumán, pero acá lo vemos porque es una ciudad hacinada. Acá murió un hombre, pero la cantidad de accidentes y de personas que terminan casi muertas que hay todos los días es increíble”, insiste.

Para concretar un abordaje integral de la problemática, resalta que “hace falta que se sienten las personas que saben: quienes estamos en las organizaciones, los funcionarios, los concejales que hacen las normas y demás. Sin esa mesa estos accidentes van a seguir sucediendo”.

Desde esa misma de defender un trabajo conjunto y colectivo, en el cual se sumen saberes distintos y complementarios, cuestiona las ideas individuales. “El sueño de un funcionario de poner una señalización o un semáforo solamente no soluciona el problema. No sé cuál es el criterio que emplea; si no se hacen las cosas con un criterio consensuado, siempre va a haber fallas. Alguien tiene que tomar una decisión política y consultarnos a los que estamos en las organizaciones. Los funcionarios, que son quienes ejecutan esto, tienen que conocer de educación, porque la salida para por una comunión de distintos elementos y situaciones que hay y que tienen que ser diagramados por el Estado, tratando de atender las necesidades de todos”, concluyó.

(Producción periodística: Guadalupe Pereyra).