28 Julio 2021
A nivel general, hay una percepción integral de que los argentinos sentimos que somos de clase media tomando en cuenta las mediciones socioeconómicas. Sin embargo, cada vez que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) o la Dirección de Estadística de la Provincia difunden sus datos, temblamos a nivel familiar frente a una realidad: la inflación sigue subiendo por el ascensor, mientras que a los salarios les cuesta hacerlo por la escalera.
Hace unos días, el Banco Mundial calculó que la pandemia de la Covid-19 ha llegado a que 1,7 millón de argentinos (sí, casi el equivalente a la población de Tucumán) descendiera en la pirámide social de la clase media tradicional a una franja de mayor vulnerabilidad. Del 51% que se percibía como familia de clase media bajó al 45%.
Hoy, una familia tipo (un matrimonio con dos hijos pequeños) precisa $ 58.597 mensuales en Tucumán para no ser considerado pobre, de acuerdo con el cálculo oficial del costo de la Canasta Básica Total (CBT). Pero hay familias que por su integración requieren de más dinero -o tal vez menos- para afrontar esos gastos mínimos para alimentarse y para costearse algunos servicios esenciales.
LA GACETA le invita a realizar un ejercicio presupuestario para establecer cuánto dinero necesita un grupo familiar para no caer en la indigencia ni en la pobreza, tomando en cuenta el número de integrantes, a través de una calculadora diseñada por el equipo de DATOS de la empresa, como otro servicio para nuestros lectores.
Aclaración: La canasta básica alimentaria es definida por el INDEC como "el conjunto de alimentos y bebidas que satisfacen requerimientos nutricionales, kilocalóricos y proteicos, cuya composición refleja los hábitos de consumo de una población de referencia, es decir, un grupo de hogares que cubre con su consumo dichas necesidades alimentarias". El índice, por lo tanto, no incluye otros gastos como el alquiler de una vivienda.
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