27 Julio 2021
La dupla Lange-Carranza compite en un catamarán a vela, clase Nacra 17. Comparado con un catamarán F16, es más largo y ancho; el mástil, más alto, también con mayor superficie de vela y orzas desplazables curvas. A diferencia de los Juegos Olímpicos pasados, en Río de Janeiro estuvieron seis meses antes entrenando para conocer los vientos. Esta vez no pudieron hacerlo, pero, pese a que son unos Juegos Olímpicos atípicos, tienen todas las chances de llevarse el oro. En Brasil, en la última regata, es donde se vio que conocían más que bien el viento, ya que fue increíble como se recuperaron luego de ser penalizados dos veces. Es una dupla excelente, se conocen mucho y eso es muy bueno. Lange es muy exigente y no todos aguantan esa presión, pero a pesar de ello, ya demostraron que no les afecta, a ninguno de los dos.
Ser abanderado es el mayor orgullo que hay y más para nuestro deporte que tiene menos difusión que otros.
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