En cuanto el plantel de Boca toque suelo argentino, todos deberán aislarse ya que se considera que rompieron la burbuja durante los incidentes que protagonizaron anoche en Brasil tras el partido por la Copa Libertadores.
El embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, había confirmado que la burbuja sanitaria no se había roto “en ningún momento”. Sin embargo, ahora se tomó esta decisión.
Tras haber sido eliminados por Atlético Mineiro, algunos jugadores se enfrentaron a golpes de puño con los custodios del club brasileño. Momentos después, ocho integrantes del plantel fueron demorados por la Policía Militar y la delegación de Boca debió pasar la noche dentro de los micros de traslado, en la puerta de una comisaría.
Según trascendió, los ocho involucrados, cinco de ellos futbolistas, debieron firmar diferentes papeles asumiendo su responsabilidad en los violentos hechos acontecidos en los pasillos del estadio Mineirao, cuando intentaron llegar al vestuario local, tras recibir cargadas de sus rivales por la derrota en los octavos de final de la Copa Libertadores.