Mambrini disfruta de una triple satisfacción

“Ahora puedo decir que, de un sueño, pasó a ser una meta a largo plazo”, estableció Lautaro Mambrini. El ganador del premio LA GACETA al mejor jugador de pádel en 2018 y 2019 resignificó el anhelo que tiene desde pequeño: ser número uno del mundo. Hay una razón, o dos; o mejor tres razones para que Mambrini haya cambiado el status quo del anhelo. A saber... el tucumano logró ser campeón en el selectivo para el Mundial Sub-18 que se hizo en Córdoba, subir a lo más alto de la clasificación nacional y además ser convocado al Panamericano Mayor.

“No se le venía dando el Mundial y ahora tiene una satisfacción triple”, contó orgulloso su papá Sergio que, además lo entrena y es el presidente de la Federación Tucumana. “Trabajo muy duro para cumplir con mis objetivos. Así que creo que lo lograré”, afirmó “Lauty” con respecto a conquistar la cima del ranking mundial. “Y si no lo logro, voy a estar seguro que hice todo lo posible”, agregó con la misma seguridad. Mambrini intensificará progresivamente los entrenamientos hasta que comiencen las competencias que se harán en México. Primero, tendrá la más difícil porque con los 17 años que tendrá para esa época enfrentará a jugadores de más edad y mayor experiencia en Tijuana. En esa ciudad se jugará el Panamericano del 25 al 28 de agosto. “Si bien trabajo para cumplir mis objetivos, no me esperaba estar convocado para la Mayor”, reconoció Mambrini. Luego de esa exigente experiencia deberá viajar hasta Torreón, al noreste mexicano.

Si bien en cuanto a intensidad de competencia es probable que no haya diferencia con la prueba previa, en el Mundial de su categoría (del 20 al 26 de septiembre) el nivel estará equiparado. “Para los dos torneos lo único que queda es trabajar, trabajar y trabajar más. Así podré conseguir los mejores resultados que serían la gloria: salir campeón y dejar bien representado al país y a la provincia”, afirmó el estudiante del último año de la secundaria.