El Gobierno nacional anunció que firmará el próximo lunes un acuerdo con el laboratorio Moderna para la provisión de vacunas contra el coronavirus y resaltó su importancia, ya que se trata de una de las pocas que se aplicó en niños y adolescentes.
El 25 de mayo pasado, el laboratorio norteamericano informó que su fórmula contra el coronavirus es "altamente efectiva" en chicos de entre 12 y 17 años, según los resultados completos de ensayos clínicos realizados.
De ese estudio participaron más de 3.700 adolescentes en Estados Unidos, de los cuales dos tercios recibieron la vacuna y un tercio placebo. “Tras dos dosis, ningún caso de Covid-19 se observó en el grupo vacunado (...) contra cuatro casos en el grupo placebo, lo que resulta en una efectividad de la vacuna de 100% 14 días después de la segunda dosis", sostuvo Moderna en su comunicado.
Eficacia
La eficacia es similar a las de la vacuna de Pfizer o la Sputnik V. Según la evidencia médica hasta el momento, comienza a tener efecto dos semanas después de inoculada la primera dosis (se observó que llega al 93% en ciertos casos, según la empresa).
Igualmente, como en el resto de las vacunas, se consigue una mayor eficacia a través de la inmunización completa. Los datos científicos publicados indican que, una vez que la persona recibe las dos dosis, la eficacia es del 94,1 %.
La eficacia demostró ser similar sin distinción de grupo de edad, género y grupo racial o étnico; como así también en los participantes con comorbilidades asociadas a un mayor riesgo de desarrollar covid-19 grave (en este último caso los estudios solo incluyeron un universo de personas de 18 o más años de edad).
Efectos secundarios
El estudio no encontró efectos secundarios severos. En los más chicos, se dieron algunos casos de síntomas leves similares a los ocurridos en adultos como fatiga, dolor de cabeza, dolor muscular y escalofríos. También pueden presentarse síntomas como fiebre y náuseas.
La vacuna fue "generalmente bien tolerada", comunicó el laboratorio.
Almacenamiento
La acuna Moderna puede ser almacenada a la temperatura normal de un frigorífico médico estándar de 2—8 ºC durante treinta días, o a una temperatura de -20ºC, hasta cuatro meses.