MIAMI, Estados Unidos.- La pileta de natación y las columnas del estacionamiento subterráneo son las principales sospechosas ahora por el colapso parcial del edificio de 12 pisos, en Surfside, un suburbio de Miami, que el 24 de junio se desplomó sin dar tiempo a escapar a más de 150 personas, entre residentes y visitantes.
La tragedia del derrumbe de parte del complejo Champlain Towers South, en Surfside, dejó ya 16 muertos y casi 150 desaparecidos, entre ellos nueve argentinos. Los rescatistas trabajan sin pausa y las familias de las víctimas esperan noticias en un centro de reunión cercano, pero las esperanzas de encontrar sobrevivientes se desvanecen con el paso de los días.
Las tareas de rescate avanzan lentamente por la apretada disposición de los escombros, por el riesgo de explosiones y por la lluvia. Ayer se identificó a otra persona fallecida, Hilda Noriega, una mujer de 92 años.
Establecer la causa del derrumbe podría tomar meses, pero ya hay sospechas fundadas que apuntan a que hubo filtraciones que deterioraron la estructura en los pisos inferiores, que cedieron y dejaron al resto del edificio sin sustento.
El diario “The Washington Post” publicó una investigación con a imágenes, testimonios, consultas a expertos y videos. El informe consigna también que un informe ya había advertido hace tres años que el deck de baldosas antideslizantes que rodeaba la piscina estaba mal construido, no drenaba bien, filtraba agua hacia el garaje de abajo y que eso había causado “daños estructurales” al edificio.
Esta teoría se profundizó a partir del relato de una mujer que vio cómo la piscina y el estacionamiento colapsaban segundos antes del derrumbe.
Sara Nir le dijo al Post que poco antes de la 1, escuchó golpes y pensó que había una obra en construcción cercana. Cerca de la 1.14, volvió a escuchar lo que parecía una pared cayendo, y salió de su departamento en planta baja para quejarse con el guardia de seguridad.
Un minuto después, cuando estaba en el lobby, en medio de un estruendo enorme, vio que parte del área del estacionamiento a nivel del suelo y el deck de la pileta se hundían sobre el estacionamiento subterráneo. Corrió a buscar a sus dos hijos y escapó del edificio.
Uno de los chicos llamó al 911 a la 1.19 y, un minuto después, sonaron las alarmas en el departamento de bomberos.
Un hombre relató que su esposa, quien continúa desaparecida, le dijo por teléfono, poco antes del derrumbe, que veía un cráter en la pileta.
En 2018, un ingeniero había encontrado “daños estructurales importantes” en el deck de la pileta causados por lo que él dijo era una falla que limitaba el drenaje del agua.
Otra de las residentes de la torre, Janette Agüero, contó que “el garaje siempre parecía estar en mal estado, había grietas, estaba inundado todo el tiempo”.
Allyn E. Kilsheimer, ingeniero contratado por el distrito de Surfside para investigar el desastre, dijo al Post que la falla en el área de la pileta podría haber desencadenado el derrumbe. “Si estos testimonios son indicadores de que el área cercana a la pileta colapsó primero, entonces el deterioro por las filtraciones y su consecuente daño a la losa de hormigón podría ser consistente con esto”, coincidió Glenn Bell, ingeniero estructural, al Post.
La investigación será larga, y deberá involucrar el estado de la estructura y del suelo, adelantaron los expertos. (Especial)