La mamá de Guadalupe Lucero, la nena de cinco años desaparecida hace ocho días en San Luis, avisó a la policía que durante la madrugada recibió mensajes extorsivos desde un teléfono mexicano. “¿Quieres de regreso a Guadalupe viva?”, decía el primero de los textos. Ahora esta comunicación es analizada por investigadores de Interpol.
Los mensajes hablaban de “entregar” a la niña y provenían de la localidad mexicana de Puebla, por lo que tomó intervención el organismo de policía internacional.
Además, Yamila Cialone, madre de la niña, contó a las autoridades que recibió una llamada con una “prueba de vida” y ella asegura que escuchó la voz de su hija. El abogado de la mujer y los investigadores prefieren ser cautos y no aventurar ninguna hipótesis al respecto.
Mientras, los rastrillajes para dar con Guadalupe volvieron a la denominada “zona cero”, en una fábrica abandonada a poco más de tres kilómetros del lugar en donde fue vista por última vez la pequeña, luego de que ayer un dato falso surgido de un llamado anónimo a la policía hizo movilizar a todos y resultó ser una broma de mal gusto.