Regreso a las aulas: las ausencias se sintieron en los lugares con más contagios

“La buena noticia” -como diría el ministro Juan Pablo Lichtmajer- es que las clases presenciales volvieron en aquellos lugares donde era posible volver. Pero en algunas comunidades del interior, donde hubo un número significativo de casos, como en Aguilares, Graneros, La Cocha, Alberdi y Burruyacu y en algunas escuelas de capital, el ausentismo se hizo sentir en las aulas, según los docentes consultados por LA GACETA.

“De un muestreo que realizamos desde ATEP pudimos comprobar un elevado porcentaje de ausentismo a causa de padres que optaron por no enviar a sus hijos a la escuela ante el miedo por los contagios. Hay comunidades donde hay mucha preocupación porque está muriendo gente joven como fue el de un psicólogo de Aguilares que pertenecía a un Gabinete Psicopedagógico de una escuela”, expresó el titular de ATEP, David Toledo. Aunque no quiso precisar el porcentaje porque le parecía “imprudente” indicó que le llegaron fotografías de toda la provincia con aulas semivacías. “Estamos en el momento más crítico de la pandemia”, advirtió.

Por su lado, el sindicato de docentes privados, Sadop, realizó una medida de retención laboral de clases presenciales, aunque de “dispar acatamiento”, según el propio secretario general Bernardo Beltrán. La medida seguirá hoy en zonas de mayor contagio.

Desde las agrupaciones docente Hugo Brito (“Isauro Arancibia”) señaló que “el 50% de los padres no mandó a los chicos a la escuela por su preocupación ante los casos de covid-19. Zonas como Alberdi, Aguilares, La Cocha, Leales y barrios de la capital están muy comprometidos”. También indicó que la docencia vivió ayer momentos de incertidumbre porque no pudieron ingresar el código correspondiente para la autorización de su dispensa laboral en el Sesop. Son docentes que pertenecen a grupos de riesgo o que tuvieron contacto estrecho con personas que dieron positivos en los test de covid-19, explicó. Ayer “a última hora se les permitió acceder al código de dispensa”, dijo Brito.

También contó que “hay docentes que intentan sacar turno de vacunación pero se dan con que no están registrados en el sistema y eso genera mucha incertidumbre”. Anoche la agrupación mantenía una reunión con la posibilidad de realizar alguna manifestación para expresar su descontento por la vuelta a la presencialidad.

Las redes docentes volvieron a encenderse al conocer el fallecimiento del licenciado Daniel Cardozo, del GPI de Aguilares. Sería la víctima número 24, según la cuenta de los docentes.

En Aguilares, “de un total de 16 escuelas primarias sondeadas, casi el 50% de los padres informaron gripe y resfrío en sus hijos y no los mandaron a la escuela”, cuenta una fuente docente que prefiere no dar su nombre.

Con más contundencia, el clima de temor se ve reflejado en la Escuela de Comercio Lola Mora de Burruyacu, donde el ausentismo ayer alcanzó el 60%, según una alta fuente del establecimiento. La escuela estaba debidamente preparada para recibir a los alumnos pero el temor de los padres pudo más y decidieron seguir las actividades en forma virtual. Es una de las zonas donde el virus atacó con más crudeza y mantiene a los vecinos encerrados en sus casas.

Por su parte, las escuelas experimentales de la UNT seguirán esta semana en forma virtual, hasta analizar la situación.

Ayer el ministro Lichtmajer reiteró que la presencialidad es irreemplazable. “La escuela es un lugar donde se construyen lazos entre las personas” publicó en la página oficial. Pero aclaró que la “la presencialidad es voluntaria. No se puede forzar pero entendemos que es muy necesario para niños, niñas y jóvenes”.

También recordó que la semana que viene se terminará de vacunar a toda la población escolar, que incluye directivos, supervisoras, preceptoras, secretarias, conserjes y docentes.

Educación superior: la Nación presentó el plan de virtualización con la participación de escuelas híbridas

El Ministerio de Educación presentó ayer el Plan de Virtualización de la Educación Superior II (PlanVES II), una iniciativa de la Secretaría de Políticas Universitarias para dotar a las instituciones universitarias de recursos que permitan fortalecer los espacios de formación presencial y remota y el desarrollo y puesta en marcha de Aulas Híbridas. La propuesta prevé una inversión de $ 1.500 millones e implica el fortalecimiento del software y hardware necesario para dar respuesta a las adecuaciones requeridas en la virtualización de la enseñanza.  Las aulas híbridas permiten el dictado de clases presenciales y virtuales al mismo tiempo y facilitan el material grabado para su permanente consulta; esto se suma a una serie de recursos educativos digitales que están a disposición del alumnado y facilitan la interacción con profesores y ayudantes de cátedra.