Quizás hubiese podido hacerlo mediante un simple llamado telefónico. Sin embargo, el diputado nacional manzurista Carlos Cisneros optó por darle un matiz formal a su pedido ante el interventor del Instituto Provincial de Cooperativismo y Mutualidad (Ipacym), el también manzurista Regino Racedo, con relación a un organismo de signo jaldista.
El legislador nacional le envió una carta documento al funcionario provincial para "interpelarlo" a que "en lo inmediato proceda a atender los reclamos que los socios, empleados y ex empleados de la Mutualidad Provincial de Tucumán vienen formulando a ese organismo".
Cisneros aludía a las denuncias dirigidas contra el legislador jaldista Daniel Deiana, que preside la entidad ubicada en Ayacucho al 100.
El dirigente bancario remarcó que, en su carácter de diputado nacional, recibió los planteos sobre "las constantes irregularidades que han sucedido y vienen sucediendo en el ámbito de la Mutualidad".
Y le enrostró al funcionario manzurista que estos denunciantes ya habían recurrido al Ipacym, pero "no han obtenido ni una sola respuesta por parte de vuestro instituto a sus reclamos".
En ese sentido, enumeró "los graves hechos de ilegalidad que suceden a diario, el desmanejo de fondos y el deterioro institucional en el que ha devenido la Mutualidad Provincial". Además, remarcó una serie de prestaciones que brindaba la entidad y que, según dijo, ya no existen. "¿Qué sucedió con todos estos servicios?", enfatizó Cisneros en la carta documento.
Y cerró con un pedido formal a Racedo. "Lo interpelo a adecuar su administración con apego a las normas, los estatutos y al ordenamiento jurídico en general, controlando y erradicando el ejercicio de conductas arbitrarias, abusivas y violatorias de los derechos de los trabajadores y de sus socios (de la Mutualidad)", indicó el diputado nacional.