27 Mayo 2021
MUCHO MEJOR. Orellana evoluciona bien de su dolencia inguinal.
La seguidilla de partidos, la carga emocional debido al mal momento que atravesó el equipo en la primera parte del torneo y el roce natural en cada partido, hizo que muchos integrantes del plantel de San Martín lleguen al receso con algunas dolencias físicas. Si bien en la mayoría de los casos eran lesiones leves, que no requerían parar durante la competencia, el parate le vino al pelo.
“Vamos a aprovechar este tiempo para recuperar jugadores de cara al futuro. Hay varios chicos que vienen arrastrando molestias y esto nos vendrá muy bien”, había declarado Pablo De Muner ni bien recibió la noticia de que la AFA había decidido frenar la competencia.
Así, durante estos días, Roberto Guillén y sus compañeros del departamento médico “santo” siguió de cerca la evolución de los jugadores que no venían al ciento por ciento. “Están mucho mejor. Pero seguiremos trabajando para que lleguen en óptimas condiciones a la reanudación del certamen”, le dijo a LG Deportiva el jefe médico del plantel.
De acuerdo al parte brindado por el especialista, todos los futbolistas podrían comenzar a trabajar de manera normal en las próximas horas. Salvo Daniel González, quien padece una pubalgia crónica y está llevando adelante un trabajo para superarla, el resto evoluciona de manera eficaz. “‘Dani’ viene respondiendo bien a los trabajos. Hay que llevarlo de a poco, pero está cada vez mejor”, aseguró Guillén.
La ecografía que le realizaron a Juan Orellana (padece un dolor a nivel inguinal que lo marginó de del duelo contra Deportivo Riestra) salió bien y, pese a que casi con seguridad iba a ser baja si el “Santo” viajaba a Mendoza el pasado bien de semana, hoy está casi listo para volver al ruedo. “No tiene dolor y su evolución fue muy buena”, explicó.
Gonzalo Rodríguez es otro futbolista que durante la última semana había trabajado de manera diferenciada por culpa de una contractura en sus aductores. Sin embargo, “Turbo” mejoró considerablemente en las últimas horas y desde ayer trabaja de manera normal.
Juan Imbert, Matías Ballini y Gustavo Abregú arrastran dolores en sus tobillos. Las ecografías a las que se sometieron los dos primeros evidenció que no padecen ninguna lesión de gravedad. Sin embargo, durante los últimos días, el cuerpo médico recomendó que realizaran trabajos de menor carga física para ayudar en la puesta a punto.
En tanto, Abregú se sometió a una resonancia, que evidenció una inflamación en la zona. “Está mejorando gracias a los trabajos kinesiológicos”, aseguró el doctor.
Por último, el juvenil Leandro Monroy que había debutado en el juego contra Nueva Chicago, durante la última semana también se había entrenado apartado del grupo debido a un dolor inguinal. “La ecografía arrojó resultados normales”, sentenció.
Los días de receso en las prácticas (en los que los jugadores trabajaron en sus casas) permitió que los afectados por diferentes dolencias mejoraran de manera considerable. Así, De Muner y su grupo de trabajo se encontró con un panorama mucho mejor al que tenían cuando tuvieron que licenciar al plantel.
En La Ciudadela aprovecharon el corto receso y ahora trabajan mirando la reanudación de la competencia. Con casi todos sus futbolistas a disposición, el entrenador comenzará a acelerar los trabajos tácticos que le permitan al equipo seguir creciendo en el juego y obteniendo más herramientas para poder dar pelea en una competencia que no ofrece margen de error.
El reencuentro
Hoy a las 9, el plantel volverá a entrenarse de manera conjunta en el complejo “Natalio Mirkin”. De Muner acelerará en la puesta a punto de cara al reinicio del torneo.
Deciden la vuelta
Los dirigentes de la mesa de la Primera Nacional están analizando cuál será la fecha para reanudar la competencia. Según trascendió, sería entre el 7 y el 9 de junio.
Campos renovados
El plantel “santo” hoy se encontrará con dos canchas prácticamente nuevas en el complejo. Los trabajos de reacondicionamiento surtieron el efecto deseado.
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