Por Daniel Salvador
25 Mayo 2021
HACIA ARRIBA. El precio de los cortes más requeridos median los $800, y para los premiun más de $ 900.
Mientras se cumple el quinto día del paro de productores ganaderos, el precio de la carne aumentó dos veces en Tucumán y los proveedores informaron en las carnicerías que “podría haber desabastecimiento el miércoles (por mañana), porque no hay stock”. En promedio las subas rondaron más del 4,5%, y desde el sector frigorífico y ganadero aseguran que no faltarán cortes en las gancheras de los puestos de venta.
Llama la atención haber llegado a este cuadro de situación. Lo que comenzó con la disposición del Gobierno nacional de suspender las exportaciones de carnes por 30 días para frenar la suba del precio y la inflación, terminó con la respuesta de un paro del sector ganadero por 9 días (hasta el viernes), asegurando que se hicieron todas las previsiones para evitar un desabastecimiento.
De acuerdo con lo verificado en las carnicerías de barrios, la media res de novillo se pagó ayer entre $ 415 y $ 430 el kilo. “Todos los lunes nos llega el pedido de carne con aumento”, aseguró un carnicero del Barrio San Martín.
En este caso, los valores de los cortes que cobran al público se calculan al doble. Y en esta proporcionalidad, se discriminan los cortes baratos de los más caros, que cuestan desde los $ 600 hasta más de $ 900 por kilo.
Hay carnicerías que tienen precios más bajos. Son las abastecidas por sus dueños, que son cadenas de frigoríficos o de productores ganaderos que no tienen intermediación. Y en algunos súper se consiguen los cortes acordados con el Gobierno, dentro del plan de Precios Cuidados.
¿Oferta y demanda?
Consultado sobre los nuevos aumentos, el gerente del Frigorifico Fidenza, Hugo Benejam, dejó entrever que aquellos proveedores se están aprovechando de la situación. “Hablan de desabastecimiento para cobrarles más a los carniceros”. Indicó que en su establecimiento se vende la media res a $ 380.
Por su lado, el presidente de la Sociedad Rural de Tucumán, Sebastián Murga, remarcó que el sector productor ganadero no sabía de los aumentos, “porque es ajeno a esa posibilidad”. “El paro se declaró el lunes pasado y empezaba las primeros minutos del jueves. Hasta el miércoles se movilizó hacienda a un precio igual al de siete días atrás. O sea que el productor no recibió un peso más que al inicio el paro”.
“No es bueno lo que está pasando. Se hizo el paro con prudencia, y se abasteció a los frigoríficos para que no faltara carne”, remarcó el dirigente rural.
“Aprovecho esta ocasión para instar al Gobierno a tomar nota que la suspensión de las exportaciones es una medida que causa confusión, daño y especulación”, agregó. En cuanto al paro ganadero, resaltó que es contundente y se desarrolla con el apoyo de otros sectores del campo.
Distintos precios
Un productor ganadero que pidió reserva de su nombre, remarcó que los aumentos son lógicos en estos momentos, ya que está centrado el negocio en la ley de la oferta y la demanda. “Los clientes comunes están abastecidos, pero aparecen nuevos compradores pidiendo cantidades importantes y se vende”, explicó.
En este sentido, se le consultó si se trataba de intermediarios, ya que esta porción del negocio está mencionada como la que distorsiona los precios finales. Apuntó que la diferencia de los intermediarios en la cadena de comercialización es mínima, y puede llegar al 3% del total. En este caso, precisó que ese negocio de la intermediación no pasa por esa diferencia sino por la cantidad que logra vender.
En cuanto a la posibilidad de desabastecimiento, el productor ganadero aseguró que no será posible, ya que la mayoría de los proveedores dispone de la hacienda requerida, por la oferta permanente de los pequeños hacendados.
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