La esquina de Santa Fe y 25 de Mayo se convirtió en el epicentro de la protesta del sector privado contra las nuevas restricciones adoptadas por el Gobierno provincial por la ola de contagios de coronavirus en Tucumán.
Bocinazos, cacerolas y aplausos resonaron en Barrio Norte a partir del mediodía. Propietarios de locales comerciales, gastronómicos y de otros rubros resolvieron manifestarse allí, luego de que las fuerzas de seguridad dieran inicio al operativo para cerrar los establecimientos que tienen prohibida la atención al público.
Gabriela Coronel, presidenta de la Cámara de Comerciantes de San Miguel de Tucumán, expresó a LAGACETA.com la profunda sensación de aflicción que atraviesa el sector.
"Si hay restricciones, tiene que haber una ayuda económica genuina por parte de la Provincia. No hay respuestas para nuestro sector. Realmente nos estamos fundiendo. Un día que no abrimos es un día sin ventas, y la preocupación es muy grande, tanto para empleadores como para empleados", aseveró Coronel.
A partir de hoy y hasta el 30 de mayo, los comercios de la provincia que no se dediquen a rubros esenciales tendrán que cerrar sus puertas para la atención al público.
Sin embargo, muchos propietarios decidieron este sábado abrir sus locales. Finalmente, un importante número de comerciantes se trasladó a la esquina de la plaza Urquiza para participar de la manifestación contra las restricciones.
"Fue espontáneo, porque la Policía comenzó a cerrar locales comerciales y gastronómicos. Y no podemos cerrar si no hay una solución económica. Esa fue la desesperación", expresó Coronel a este diario.
Además, detalló cuál es la postura del sector para los próximos días. "Necesitamos respuestas ya (de las autoridades provinciales). Si no hay medidas económicas genuinas para el comercio, vamos a seguir abiertos", añadió.