En los últimos partidos San Martín demostró ser un equipo renovado, con otro aura, lleno de vida y con ganas de transformarse, de una vez por todas, en protagonista de la zona A de la Primera Nacional. “Hay que mantener la mesura, la humildad, esto es largo y sólo obtuvimos dos triunfos”, plantó bandera Pablo De Muner, intentando bajar las efervescencia que entregaron dos victorias en fila; pero lo concreto es que el rendimiento del equipo abre buenas sensaciones de cara al futuro en La Ciudadela.
Está claro que todavía debe mejorar en muchos aspectos, pero el “Santo” recobró una idea, una identidad y más allá de que lo que suceda, trata de imponerla en cada cancha. “Tenemos que comprender que nunca hay que perder la paciencia. Es clave para encontrar los espacios, más en esta categoría en la que los equipos no te dejan jugar”, aseguró el DT.
Y el equipo, de a poco, va adoptando como tal esa filosofía. El gol que decoró la victoria ante Deportivo Riestra es una muestra de lo que pretende el nuevo cuerpo técnico. Fue un tanto de salida, empezando desde abajo, con toques, paciencia, ocupación de espacios, superioridad numérica y aceleración en los metros finales. Esa fue la receta para desactivar el tan cerrado como rocoso esquema defensivo que planteó el “Blanquinegro”. “Es lo que buscamos. Hay que tratar de tener mucho más de esos momentos”, aseguró el entrenador sobre una jugada que tratará de ser una marca registrada de aquí en adelante. “Es importante que el equipo entienda y comprenda la importancia de tener la pelota, de estar bien posicionado, de tener paciencia y a partir de ahí aprovechar los espacios que te puede llegar a dar el rival”.
“Pablo siempre pide que uno de los volantes centrales llegue al área para aprovechar el pase atrás. Fue una jugada rápida y tuve la suerte de poder pegarle bien y que sea gol”, explicó su “joyita” de laboratorio Matías Ballini, a quien sus compañeros cargaron por la soberbia definición. “No me tienen fe, pero es lo lindo porque terminás sorprendiendo. Es cuestión de tener moral; por más que otros piensen lo contrario uno tiene que confiar”; agregó con firmeza el volante central.
Lo que tal vez no pudo llevar adelante en Córdoba, San Martín lo pudo poner en práctica durante en el último juego como local. Esta vez tuvo mayor posesión e intentó siempre con paciencia (salvo en el comienzo del duelo, en el que se lo vio un poco ansioso por encontrar la diferencia) buscar el momento exacto para asestar el golpe.
“De a poco vamos encontrando el nivel que pretende Pablo. En los últimos partidos el equipo viene creciendo y eso es lo más importante. Hay que seguir por este camino”, sentenció Gonzalo Rodríguez, el punta que se sacó la mufa y marcó el camino para que el equipo pudiera cortar la nefasta racha sin triunfos en La Ciudadela.
El juego del domingo, contra Gimnasia de Mendoza (se jugará desde las 21 y se verá por TyC Sports), será crucial. Justo cuando comienza a solidificar su idea, San Martín visitará a un rival que está entre los mejores de la zona. “Debemos tratar de mantener nuestra identidad”, advirtió el DT, que está feliz porque el equipo comenzó a plasmar lo que el pretende, y eso le sirvió para asegurar una victoria muy esperada.
Agenda
Desde las 9, en el club Lince, el plantel llevará a cabo la penúltima práctica en nuestra provincia. Por la tarde, los futbolistas serán sometidos a los testeos de covid-19.
Buenas noticias
Cuando la mano se acomoda, las buenas llegan todas juntas. De cara al duelo contra Gimnasia de Mendoza, De Muner tendrá a todos los futbolistas a disposición.