Intendentes opositores reclaman la coparticipación de Ingresos Brutos

El diálogo entre los cuatro intendentes de Juntos por el Cambio es más frecuente. Esta tarde, en Yerba Buena, el jefe municipal Mariano Campero recibió a sus pares Germán Alfaro (San Miguel de Tucumán), Sebastián Salazar (Bella Vista) y Roberto Sánchez (Concepción), quienes comenzaron a delinear una agenda para la reconstrucción de la agenda local en base a tres cuestiones que inquietan en cada una de sus jurisdicciones: la falta de empleo, la inseguridad y la gobernabilidad política y financiera para el período posCovid. Si bien coinciden en que la pandemia de la Covid-19 condiciona todos los planes, creen que es necesario comenzar a delinear una agenda de largo plazo, que trascienda la actual gestión.

En una charla con LAGACETA.COM, Alfaro y Campero indicaron que la falta de trabajo ha sido una constante y que, para no agudizar la situación, tuvieron que tomar medidas que resguarden a varios sectores de la actividad económica, como el caso de los gastronómicos. "Según datos de la FET, se han cerrado unos 400 locales durante la pandemia y eso repercute fuerte en la situación socioeconómica del municipio, desde los índices de desempleo hasta la misma recaudación", confiesa el intendente capitalino. Campero, en tanto, remarcó que la sociedad reclama soluciones a sus problemas de aquellos que resultaron electos por su voto. "Hay que tratar de atender, de alguna manera, la demanda laboral, que indudablemente bajará gradualmente la tasa de pobreza y, a la vez, los índices de inseguridad. Uno observa que tanto el gobernador (Juan Manzur) como el vice (Osvaldo Jaldo) están alejados de la problemática real, envueltos en una pelea política que le hace mal a Tucumán, cuando deberían estar gestionando para solucionar los problemas", afirmó. En el mismo sentido se expresó el intendente de Bella Vista. "No es momento para discusiones internas, sino para solucionar los problemas reales de la gente. Aquí hay que sentarse a discutir las medidas para generar más empleos, diseñar un plan de seguridad y debatir un programa como lo hicieron algunos países de posguerra, porque ese es el escenario que tenemos con la pandemia de la Covid", expresó Salazar. Su colega de Concepción añadió que, en esa tarea, el Gobierno debe abrir una ronda de diálogo con los sectores empresariales, industriales, de la Iglesia, los municipios, referentes sociales, de las universidades, entre otros, que pueden contribuir con ideas para que Tucumán pueda despegar y mejorar, gradualmente, sus indicadores socioeconómicos. Sánchez también afirmó que las internas que el oficialismo ha expuesto en los últimos meses "constituyen una falta de respeto a una sociedad que demanda más trabajo, con una desocupación que está creciendo, mientras se observa un festival de contratos políticos".

Los cuatro intendentes indicaron que, más allá de que el Pacto Social contribuye a pagar los salarios municipales, el Poder Ejecutivo debería coparticipar impuestos provinciales, como Ingresos Brutos y Automotor, como una manera de brindarle más autonomía financiera y no quedar expuestos a las presiones políticas. Asimismo, se acordó realizar semanalmente una evaluación de gestión y coordinar ayudas y colaboraciones interjurisdiccionales con la participación de funcionarios de los cuatro municipios.