La audiencia fue clave por dos razones. Se le dictó la prisión preventiva por 15 días a los dos hombres que habían sido detenidos con Lucas Gordillo. También trascendió que en el momento en el que fue arrestado, se encontraba con el hijo de Solange Manzaraz Beltramino, la otra imputada en la causa, a la que se le había otorgado el arresto domiciliario.
La fiscala Mariana Rivadeneira había ordenado al comisario Christian Peralta profundizar la investigación de un dato que había recibido. Encomendó al suboficial José Villa que hiciera una tarea de inteligencia en un domicilio de La Plata al 1.400, donde supuestamente se presentaría el prófugo. Cerca de las 16, llegó Gordillo al lugar. A los pocos minutos, llegó conduciendo un Peugeot 307 José Fernando Luna. El prófugo se subió al vehículo con el niño de la mano y partieron de ese lugar.
El efectivo lo siguió en su auto particular y mientras los perseguía pidió apoyo a su compañero William Correa y a su jefe. Continuaron la persecución hasta que el Peugeot 307 se detuvo para que subiera Luis Antonio Battaglia. Avanzaron unos metros y fueron interceptados por los efectivos. Se dirigieron a la seccional 11ª para realizar los trámites legales. Allí identificaron al pequeño, que es hijo no reconocido de un integrante del clan Toro, y se lo entregaron a unos parientes. También requisaron la mochila que llevaba Gordillo. Encontraron dos celulares y un arma que serían de él.
Según confiaron fuentes judiciales, Manzaraz Beltramino había solicitado a las autoridades el cambio de domicilio para cumplir con el arresto domiciliario. Ella estaba residiendo en Lomas de Tafí y quería hacerlo en La Plata al 1.400, lugar donde se presentó Gordillo. Ayer estaba previsto que se mudara.
Los defensores de la joven, por el momento, prefirieron no hacer declaraciones sobre el tema, ya que hasta el momento nada de ello constaba en el expediente.
Si se confirma esta información, a Manzaraz Beltramino le revocarían el arresto domiciliario por haber mantenido contacto con Gordillo, lo que podría tomarse como un entorpecimiento al accionar de la Justicia.
El debate
“No podían desconocer quién era Gordillo por la repercusión del crimen de (Pablo) Mariotti. Al haberlo trasladado y acompañado, lo encubrieron, ya que su deber como ciudadano es haber avisado para que lo detuvieran”, indicó el fiscal Ernesto Salas López al fundamentar la acusación en contra de Luna y de Battaglia.
Ernesto García Biagosch, que defendió a Luna, y José María Molina, a Battaglia, rechazaron los cargos. El fiscal solicitó que se les dicten 45 días de prisión preventiva, pero el juez Eduardo González ordenó que sólo sigan privados de su libertad por 15 jornadas.