El futuro, en San Miguel de Tucumán, será a colores. No se trata de una campaña televisores de hace 40 años, sino de medio ambiente. Dentro de tres meses, las vecinas y vecinos en 16 cuadras de la ciudad tendrán bolsas de tres colores cerca del tacho de basura: verde para vidrio y metal; azul para cartón y papel; y amarillo para plásticos. Cada vez que quieran tirar cartón, papeles viejos, latas y demás, preservarán esos productos limpios en una bolsa de tela y sacarán un día a la semana -a una hora a determinar- una bolsa de cada color para comenzar con la recolección diferenciada. Para la basura orgánica seguirá pasando todas las noches el camión de la basura.
La Municipalidad se prepara para dar un primer paso histórico en la agenda de medio ambiente: ya están delimitadas las primeras cuadras de la prueba piloto para la separación de residuos y poner el material reciclable a disposición de recuperadores urbanos. El objetivo final es a 20 años, abarcando toda la ciudad, para reducir las toneladas de basura destinadas a relleno sanitario.
Jorge Pérez Musacchia, director de Higiene Urbana de la Municipalidad, dibujó un esquema frente a LA GACETA señalando cuáles serán las cuadras comprendidas en el primer cuadrante para comenzar con la experiencia del Programa Permanente de Separación de Residuos Sólidos Urbanos en la capital, como establece la ordenanza sancionada la semana pasada por unanimidad. Se comenzará por las viviendas de las cuadras dentro del cuadrante conformado por la avenida Roca, Congreso de Tucumán, Lamadrid y Sáenz Peña.
“Estamos frente a un gran desafío para la ciudad. Hemos tenido otras experiencias de campañas de separación de residuos con estaciones ambientales y luego tuvimos que quitarlas porque la gente tiraba cualquier cosa en cualquier tacho. En este caso, como esa separación se debe realizar en cada casa, nos permitirá avanzar en el cambio cultural necesario para empezar con el reciclaje en la ciudad”, valoró Pérez Musacchia. Explicó que la capacitación será fundamental, por lo que promotores ambientales explicarán casa por casa cómo se debe realizar la separación, qué día pasará un camión para retirar cada producto y a qué horarios deben sacarse las bolsas de colores. “Ahora comenzaremos con las reuniones con la firma 9 de Julio, que se encarga de la recolección, para delinear días y horarios para la recolección diferenciada. La capacitación será fundamental”, agregó.
Beneficios
A la hora de trazar las ventajas de la separación de la basura entre elementos reciclables y orgánicos, Pérez Musacchia coincide con el eje del medio ambiente, como habían trazado los ediles en el Concejo cuando se aprobó. “El 40% de los residuos sólidos urbanos puede reciclarse, es un volumen enorme dejará de ir a relleno sanitario”, explicó el funcionario.
Otro punto que destacó abarca a los recuperadores urbanos: “aunque la ordenanza original establece que el 50% del material reciclado debe cederse, vamos a destinar la totalidad del material a disposición de la gente que vive de estos materiales. Entendemos que en las primeras etapas esto puede no ser significativo, pero a medida que avancemos y cubramos más cuadras, este material irá incrementándose. Esperamos, por sobre todo, que la gente entienda que reciclando le da más dignidad a quienes cartonean porque no deberán buscar entre basura elementos, exponiéndose a cortes e infecciones”.