Casi al mismo tiempo que un equipo de la Oficina Especializada en Violencia Familiar (Ovifam) del Ministerio Público Fiscal estimaba que Paola Tacacho estaba expuesta a nivel alto de riesgo, un psiquiatra diagnosticó una patología de salud mental al femicida de aquella, Mauricio Parada Parejas, y hasta recomendó la alternativa de la hospitalización. El 30 de julio de 2018, la defensora Claudia Cecilia Robles introdujo la opinión del médico Juan Salvador Yalour en el caso N°6, que en ese momento seguía a cargo del ex fiscal Washington Navarro Dávila.
Parada Parejas padecía un trastorno esquizoide de la personalidad, según Yalour. El joven había comenzado a acudir semanalmente al consultorio del psiquiatra en junio luego de ser detenido por orden del ex juez Víctor Manuel Rougés y como consecuencia de la violación de la segunda medida perimetral favorable a Tacacho. El facultativo consideró que el paciente presentaba “un patrón general de distanciamiento de las relaciones sociales”: “tiende a las actividades solitarias que no requieren de interacción con otras personas”.
Yalour observó que Parada Parejas tenía una gran dificultad “para modificar sus conductas y rutinas”, y que se inclinaba por repetir “rígidamente” sus actividades: “se mantiene enfrascado en sí mismo, indiferente a la aprobación o crítica de los demás. No hay un proyecto de vida, ni laboral, ni familiar, y su posición es pasiva en general”.
El psiquiatra certificó que el imputado había comenzado un tratamiento con medicación y psicoterapia, pero advirtió que la mejoría iba a ser “lenta y parcial”. “Debe considerarse la posibilidad de una internación por un período en una clínica psiquiátrica. Presenta episodios psicóticos muy breves (minutos u horas), en especial en las situaciones de estrés”, añadió Yalour. Tras transcribir este diagnóstico, la defensora de Parada Parejas solicitó a Navarro Dávila que tuviera en cuenta la información, “como así también la posibilidad” de una pronta hospitalización.
A las conclusiones de Yalour se añadieron las que Alejandro Kotowicz, psicólogo del Gabinete Psicosocial del Poder Judicial, proporcionó el 18 de septiembre de 2018. “La personalidad de Parada Parejas presenta provisionalmente compatibilidad con la posición esquizoide, como patrón general de inestabilidad y distanciamiento de las relaciones sociales, y de restricción de la expresión emocional, con conflictos en la autoimagen, los afectos y la impulsividad (sic). No descarto otros rasgos psicopatológicos. Debe continuar haciendo psicoterapia” , escribió el profesional. Kotowicz relató que de los resultados de las técnicas que había aplicado al femicida podía inferir un perfil psicológico donde se destacaban el egocentrismo, la inseguridad, la evasión, la inmadurez, la dificultad para las relaciones interpersonales y las defensas psicológicas pobres. “No manifiesta temor ni angustia frente a la posibilidad de ser penalizado”, dictaminó el psicólogo.