Paola Tacacho inició la segunda causa penal contra el femicida Mauricio Parada Parejas dos meses y medio antes de que la fiscala Adriana Reinoso Cuello archivara la primera. Ese nuevo proceso terminó en junio de 2017 con la desestimación del requerimiento de elevación a juicio y el sobreseimiento del imputado dispuestos por el juez Juan Francisco Pisa.
La víctima volvió a denunciar a Parada Parejas porque este incumplía la restricción de acercamiento vigente desde mayo de 2016 en virtud de un pedido de Reinoso Cuello, que en septiembre de aquel año archivó la causa sin investigar al acusado. “Quiero que se tomen las medidas necesarias para frenar el delito cometido en mi contra”, pidió de vuelta Tacacho. Esta otra denuncia no ingresó en la unidad de Reinoso Cuello, sino en la del fiscal Diego López Ávila, quien consideró probada la supuesta desobediencia judicial, pero no logró convencer a Pisa.
“Hoy como a las 17.45 aproximadamente, mientras me dirigía de mi trabajo a mi domicilio, observé que el ciudadano Parada Parejas circulaba por la vereda de mi casa. Me sentí muy intimidada y perturbada ya que este tiene una orden de restricción de acercamiento requerida por la Fiscalía N°6 (de Reinoso Cuello) que rige desde el 27 de mayo”, refirió Tacacho en la Comisaría I°. La profesora de Inglés añadió que las transgresiones habían empezado antes: “pese a la medida, el 1 de junio de 2016, Parada Parejas estaba sentado en la vereda al lado de mi trabajo como siempre. (...) Hice dos denuncias previas y él aún no depone su actitud”.
Del análisis del expediente 34.121/16 (caso N°2) surgen los siguientes hallazgos: 1) que luego de que la joven advirtiera que el agresor no cumplía la medida de protección, el fiscal López Ávila y su colega Carmen Reuter se inhibieron sucesivamente: nadie reparó en el hecho de que Reinoso Cuello había actuado antes y seguía haciéndolo en ese momento en los casos N°1 y N°3; 2) que así y todo, y a continuación de la intervención del fiscal Alejandro Noguera, López Ávila llegó a requerir el juzgamiento de Parada Parejas 16 días después de que Reinoso Cuello archivara el primer expediente, y 3) que Pisa declaró la inocencia del imputado con el argumento de que el testigo citado para corroborar la denuncia, Marcelo Alejandro Rodríguez (un amigo de la docente), no recordaba la hora o las circunstancias en las que había visto al acusado mientras este vigilaba a Tacacho.