ASUNCIÓN.- El Gobierno paraguayo comunicó ayer que todas las camas de terapia intensiva (UTI) están ocupadas en el sector público. El país vecino atraviesa una profunda crisis sanitaria y política en medio de la segunda ola de coronavirus, que registra máximos de 2.000 contagios al día, un 40% más en un mes.
“Todas las camas UTI están ocupadas. De las 655 camas que tenemos en el sector público, los hospitales integrados y el Instituto de Previsión Social, tenemos actualmente 655 camas ocupadas”, alertó Leticia Pintos, directora de Redes y Servicios de Salud de la cartera sanitaria nacional.
Los 92 lechos que existen fuera de UTI para reanimación también están ocupados al 100%. En el Hospital Alto Paraná, por ejemplo, se habilitaron 42 nuevos lugares la semana pasada y ya se ocuparon al menos 30 de ellos. Está previsto que en el Hospital Nacional de Itaugá comiencen a funcionar 16 camas más.
“Si comparamos con lo que era hace un mes, prácticamente se ha duplicado el número de casos que tenemos por semana. También hay un importante ascenso del número de fallecidos por covid-19”, informó Guillermo Sequera, responsable de la Dirección General de Vigilancia de la Salud.
Malestar sociopolítico
Paraguay recibió el viernes el primer lote de 36.000 vacunas enviado por el mecanismo Covax de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Mientras, recrudecen las críticas al Gobierno de Mario Abdo Benítez por la gestión de la pandemia y otros escándalos que envuelven a su gestión.
Ayer hubo fuertes protestas opositoras por la falta de insumos y el retraso en la llegada de vacunas luego de que el Gobierno transfiriera, según su versión, el dinero de forma equivocada. La semana pasada, Abdo Benítez logró sortear por segunda vez en un año un pedido de juicio político de destitución. El presidente pidió la renuncia en los últimos días a cuatro ministros, entre ellos el de Salud. (Especial).