19 Marzo 2021
POR ZOOM. El juicio abreviado contra "El Loco Gerardo" se llevó a cabo hoy. Foto: Prensa MPF
Durante febrero, el Ministerio Público Fiscal impulsó la condena de 92 personas imputadas por diferentes delitos. La puesta en funcionamiento del nuevo Código Procesal Penal en Tucumán, vigente desde el 1 de septiembre de 2020, generó un cambio de paradigma en el plan de persecución penal.
La figura del juicio abreviado, una forma alternativa para la culminación de procesos penales, tomó trascendencia con el nuevo Código. Esa situación fue el disparador de 90 de las condenas que se produjeron en el segundo mes del año. Las dos restantes correspondieron a las que se impusieron a dos personas en sendos juicios orales celebrados en el Centro Judicial de Concepción. Del total de 90 condenas a imputados en juicios abreviados, 63 se concretaron en el Centro Judicial Capital, 21 en el Centro Judicial de Concepción y 6 en el Centro Judicial de Monteros.
Los avales
La rapidez con que se resuelven las causas y sus pertinentes condenas, que en muchos casos se dan en plazos muy cortos desde la aplicación del nuevo Código Procesal Penal, fueron reconocidas por abogados del foro local.
Para el letrado Patricio Char, el juicio abreviado y de juicio a prueba son instituciones excepcionales. Dijo que hay un verdadero cambio de paradigma en cuanto al sistema anterior que impulsa a todos los operadores judiciales y a la sociedad a informarse y tratar de comprender este cambio cultural que significa la aceptación de la institución del juicio abreviado. "Esto va a tener un favorable impacto el día de mañana en la lucha contra la inseguridad, que necesita a la vez de trabajos articulados entre interpoderes y sobre todo una aceptación, por parte de la sociedad, de que esta es una excelente salida de un problema que nos aqueja hace años", resaltó.
La oralidad
Mariano Arcas, abogado que también trabaja en el fuero penal también elogió el sistema. "Tengo una mirada positiva del nuevo sistema y celebro que haya iniciado, porque viene a solucionar los defectos que tenía el proceso anterior. Sobre todo, destaco la aplicación de la oralidad, que es muy importante para lograr una buena administración de justicia. Es un beneficio para las víctimas que pueden participar del proceso en las audiencias y también para las otras partes", señaló.
Por último, Camilo Atim, que también litiga en el fuero penal admitió las ventajas. "Los juicios abreviados y las salidas alternativas permiten una rápida resolución del conflicto, que es lo que muchas veces reclama la víctima, llegando a un acuerdo entre las partes en un proceso que busca la celeridad", precisó.
"Nos encontramos frente a una forma de litigar a la que no estábamos acostumbrados, con procesos, con audiencias, y eso requiere tiempo para que funcione mejor, pero hasta el día de hoy a mi criterio el balance es positivo. Desde la víctima se obtiene una respuesta rápida a su conflicto, que es propio de un proceso por audiencias, que se caracteriza por la celeridad”, insistió.
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