Después de analizar un borrador del proyecto de la nueva Ley de Biocombustibles, que impulsa Nación, el ministro de Desarrollo Productivo de la provincia, Álvaro Simón Padros, expresó su gran preocupación: de aprobarse, perjudicaría mucho a Tucumán.
Pese a la consternación, Padros dijo a LA GACETA que tiene la esperanza de que ahora se apruebe una prórroga de la ley actual (que vence en mayo) y que luego habrá tiempo para discutir la nueva ley. El funcionario hizo hincapié en que espera que el gobierno nacional permita la participación de las provincias en la elaboración de la nueva normativa, para que se tengan en cuenta todos los puntos de vista.
Padros enfatizó que el borrador al que accedió surge de un diagnóstico errado.
“Nos preocupa mucho que el proyecto habilite la participación de las petroleras para la elaboración de biocombustibles. El actual proyecto las excluye”, dijo. Y sentenció: “Se ve que el lobby petrolero es muy fuerte”.
El proyecto no sólo da pie a que las petroleras participen en el negocio, sino que les da algunos beneficios que les permitirá acaparar el mercado.
Padros dijo que en el proyecto de la nueva ley se elimina las preferencias y protecciones de las economías regionales, PyMES y plantas no integradas; mientras se habilita a las petroleras para ser productoras de Bios. “El actual régimen las excluye porque quien mezcla y distribuye no produce, y viceversa”, enfatizó.
Otro punto es que crea un mercado de libre oferta y demanda de volúmenes (no hay asignación de cupos como en la actual), con lo que las petroleras estarán integradas verticalmente, para autoabastecerse, y dejarán sin mercado a las plantas independientes que actualmente abastecen.
El Ministro tucumano incluso sostuvo que el nuevo proyecto va en contra de las políticas ambientales que sigue el mundo. “Es la oportunidad de descarbonizar la matriz energética”, dijo y enfatizó que en todos los países se va hacia una forma más amigable con el medio ambiente de generar energía. “Es necesario dar una oportunidad a otras energías. Hacía ahí va el mundo. No hay discusión sobre eso. Ir en contramano me parece un error”.
Finalmente está el argumento laboral. En el país hay 54 plantas de biocombustibles, que generan 65.000 puestos de trabajo. Todo esto se pondría en riesgo con la nueva ley.
A pesar de este escenario, Padros no pierde la esperanza. Cree que el borrador puede ser modificado. Todavía no hay nada irreversible.