El presidente Alberto Fernández aprovechó ayer la celebración por un nuevo homenaje del natalicio del libertador José de San Martín para criticar a quienes lo señalan por la responsabilidad del gobierno en el denominado “Vacunatorio VIP” que le costó el cargo al ministro de Salud Ginés González García.
En Yapeyú, y rodeado por gobernadores del Norte Grande, entre ellos el de Tucumán Juan Manzur, apuntó contra medios de comunicación y referentes de la oposición. Aseguró en ese sentido que mientras el Gobierno trabaja en ir a buscar vacunas para llevarle tranquilidad a la ciudadanía, desde ciertos sectores buscan enredar a los argentinos en “discusiones que no son importantes”. “Nadie vino a decirme ‘Hice una gestión en China para conseguir una vacuna’, ‘Hice una gestión en Estados Unidos para conseguir una vacuna’. Lo tuvimos que hacer solos en compañía de los gobernadores”, se quejó. Y agregó: “cuando veo en diarios, en la televisión y en las redes que se generan debates que nos obligan a desentender lo importante, pienso en aquellos hombres que no tenían esta adversidad que es luchar contra la prédica mal intencionada, contra las voces altivas que se levantan y se olvidan de lo que hicieron cuanto tuvieron que trabajar por los argentinos”.
Fernández prometió que seguirá trabajando para adquirir más dosis y confirmó que el fin de semana llegarán nuevos componentes del desarrollo ruso Sputnik V y, durante marzo, nuevas vacunas de AstraZeneca, además de las de Sinopharm que llegaron anoche a Ezeiza.
Fernández continuó con su defensa: “a nosotros nos maltratan. Primero me dijeron que envenenaba a las personas y ahora todos quieren envenenarse. No importa. Cuanto más me quieren hacer claudicar, yo pienso en San Martín. No voy a ser nunca como él, pero quiero que algo de él me inspire”, cerró.
Sin embargo, desde la oposición no cesan las críticas. “Este sábado marchemos en paz, por la angustia de los adultos mayores, por el sentimiento de injusticia de los que están en primera línea contra la Covid y por la indignación que provoca que la oligarquía K se apropie de la vacuna”, escribió en su cuenta de Twitter la presidenta del PRO, Patricia Bullrich. La representante del PRO se refirió de esta forma a la asignación irregular de vacunas. “Lo del vacunatorio VIP es una inmoralidad, una angustia para las personas mayores de nuestro país, una indignación para los ciudadanos y una indignidad del Gobierno”, manifestó y agregó: “el presidente está fuera de una lógica razonable de relación con la gente. No puede haber funcionarios que utilicen su cargo para darles vacunas a los amigos del poder”. “Lo que criticamos es que Ginés González García y seguramente muchos más funcionarios violaron el sistema y generaron privilegios”, apuntó y remarcó que durante el Gobierno de Mauricio Macri no hubiera ocurrido algo así. “Nosotros tenemos pautas morales y éticas: nuestro Ministerio de Modernización hizo transparentes todos los actos de la gestión, publicable y ubicable para la sociedad”, sostuvo.
El diputado tucumano José Cano aseguró que conoce del llamado a la marcha realizado por Bullrich, pero aseguró que por ahora oficialmente no hay ninguna convocatoria en Tucumán.
Posible faltante
Alfredo Cornejo, presidente de la UCR, denunció por su parte que existe una diferencia de casi 80.000 vacunas del total de 1.800.000 que han ingresado al país, pero que no se encuentran distribuidas y no hay información acerca de dónde están.
El diputado sostuvo que “según los anuncios hechos por el propio Gobierno, a la fecha constituyen un total de 1.800.000; sin embargo al ingresar al Monitor Público de Vacunas que lanzó el Poder Ejecutivo se verifica en el ítem de dosis distribuidas que las mismas alcanzan un total de 1.720.115”.