19 Febrero 2021
Gabriela Uzqueda es una tucumana a la que su pasión por los animales la llevó tener a su cargo, hoy, a unos 90 perros que fueron rescatados de situaciones de abandono y de maltrato.
"Desde muy pequeña nació esta pasión por los animales, en mi casa siempre mi papá rescató animales de la calle. Al igual que a muchas compañeras, nos motiva la genuina intención de propiciar, diseñar y fomentar políticas públicas para la promoción y resguardo de los derechos, integridad y dignidad animal, abordando la problemática desde la ética, concientización, y fundamentalmente la legislación", dijo en diálogo con LAGACETA.COM
La mujer pertenece a la asociación "Perros de la Calle" desde hace 25 años y es actualmente su presidenta. Comenzó a colaborar con ellos desde muy joven.
Uzqueda, quien se hace responsable de todos los gastos que implica mantener a los animales, relató cuál es la situación de los proteccionistas en la provincia.
"En mi caso tengo en mi casa a los que tienen algún tipo de discapacidad y no pueden estar solos. Y alquilo otra vivienda para los demás perritos", señaló. Y agregó: "todo esto requiere un gran esfuerzo de tiempo y dinero; también se postergan muchas necesidades o proyectos personales".
Consultada sobre el mantenimiento de los canes, dijo: "no recibimos ninguna asistencia del Estado. Aparte de mi trabajo vendo distintos productos de perfumería, cosméticos y artesanías. También recibimos donaciones de distintas personas que sienten empatía por la causa".
Ayer, la Legislatura aprobó una ley que prohíbe en todo el ámbito del territorio provincial, la práctica de la eutanasia, las matanzas y el sacrificio de perros y gatos por parte del Estado en cualquiera de sus niveles de Gobierno, ya sea en forma directa o indirecta, en los casos de tercerización de actividades estatales a través de cualquier persona física o jurídica”.
La rescatista destacó la aprobación de la norma, que incluye también la castración masiva de animales, ya que considera que la provincia sufre exponencialmente un estado de sobrepoblación de animales.
"La ejecución de castraciones quirúrgicas y masivas sistemáticas, extendidas y abarcativas es una cuestión prioritaria. Es el único método de control demográfico ético y definitivo de la superpoblación de la fauna urbana, es una política de salud pública integral y preventiva", sostuvo.
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