El fallo del tribunal fue unánime: determinó la responsabilidad penal del adolescente acusado del femicidio de su novia, Dana Agostina Alascio, de 16 años, quien murió de un disparo en el pómulo. El hecho ocurrió el 23 de agosto de 2019, cuando el autor tenía 17 años. Como la ley lo establece, un juez de Menores deberá definir qué pena se le impondrá por haber sido encontrado culpable de homicidio triplemente agravado por el vinculo, por mediar violencia de género y por el uso de armas de fuego. Esta sería la primera vez que un adolescente es condenado por femicidio en la provincia.
Antes de dar su veredicto, los jueces Dante Ibáñez, Fanny Siriani y Judith Solórzano le dieron la posibilidad al acusado y a los padres de la víctima para que se expresaran. Los magistrados habían oído el viernes los alegatos del fiscal de Homicidios, Carlos Sale, de los defensores José Luis Robles y Víctor Padilla, y de la defensora de Niñez, Adriana Mónica Romano.
Los padres de Dana pasaron a declarar juntos. “Lo único que quiero es Justicia. Él le quitó la vida a mi hija y él tiene que pagar”, sintetizó Marcela Soria, quien sostenía una foto de la adolescente. Juan José Alascio repitió las palabras de su esposa y luego agregó que deseaba aclarar algunas cosas que había oído durante los alegatos de la defensa. “Todo lo que sabemos y que contamos nos enteramos después del hecho. Lamentablemente mi hija estaba enamorada de él y nos contaba muy poco lo que sentía”, comenzó diciendo.
Luego abordó los temas que más le preocupaban y explicó que cuando llevaron a la menor al ginecólogo porque había perdido un embarazo, el médico no habría detectado golpes porque la chica habría sido castigada a golpes unos 10 días antes.
Alascio se levantó del asiento y le mostró unas fotos que habrían recibido a un año del crimen a modo de amenaza. “Al día de hoy siguen tratando de amedrentarnos”, agregó. Por último, aseveró que además el adolescente enjuiciado habría tenido un episodio de violencia de género con su actual novia.
El acusado, que cumplió la mayoría de edad cuatro meses después del crimen, fue mucho más breve al dar sus últimas palabras. “Agostina era mi novia, queríamos formar una familia. Yo nunca le pegué, tampoco es cierto que le haya pegado a mi actual novia”, enfatizó.
Argumentos
Tras declarar la responsabilidad penal del joven, los magistrados, acorde con lo que exige el nuevo Código, argumentaron los porqués de su fallo. Fue la jueza Siriani la que más detalló sobre la decisión tomada. “La autoría en el hecho nunca estuvo en duda desde que empezó este debate. Debíamos determinar si es que hubo dolo y consideramos que sí, porque el disparo fue a 50 centímetros de la víctima y porque los peritos indicaron que fue un disparo directo; el mismo acusado reconoció eso”, argumentó Siriani.
“No se acredita que no sepa utilizar una pistola, cuando se trata de una persona que vendía armas desde la cuenta de Facebook de la víctima”, agregó la jueza, que además sostuvo que el vinculo y la violencia de género quedaron demostrados en los testimonios recopilados. “Dana era vulnerable por su condición de mujer y de niña. El móvil del crimen fue la decisión de la víctima de terminar la relación”, fundamentó.
Ibáñez fue contundente: “Nadie limpia un arma a 50 centímetros de otra persona. Ahí se demostró la intención de disparar”.
Solórzano, jueza especializada en menores, aprovechó su turno para explicar al público que la ley juvenil es explícita y que escapa a los magistrados salir de esos parámetros. “No podemos adelantar una fecha ni qué graduación de pena le darán al acusado”, concluyó.
Los detalles del caso
1- Dana Agostina Alascio recibió un disparo en el pómulo en la casa de su novio. Ambos eran menores de edad. Luego el adolescente tomó el arma y huyó. La joven murió desangrada apenas fue llevada al CAPS San Martín.
2- El prófugo fue encontrado días después en Lomas de Tafí. El fiscal Carlos Sale lo imputó por femicidio. El adolescente no negó haber efectuado el disparo, pero señaló que se había tratado de un accidente cuando limpiaba el arma.
3- Ayer el tribunal integrado por Dante Ibáñez, Fanny Siriani y Judith Solórzano determinó la responsabilidad penal del menor en este homicidio agravado por el vinculo, por violencia de género y por el uso de armas de fuego.
4- Al tratarse de un menor de edad, un juzgado de Menores deberá evaluar la sentencia de ayer y determinar qué graduación de pena le corresponde. Por su condición, el autor del crimen no puede recibir perpetua.