El robo de celulares en vía pública es uno de los delitos más comunes actualmente.
Hay una línea telefónica para hacer la denuncia desde cualquier dispositivo, a través de la cual el celular queda inutilizable y hasta da la chance para, en caso de recuperarlo, dejarlo operativo y listo para su reutilización.
Ante el robo o pérdida del celular, en primera instancia se debe hacer la denuncia ante la empresa de telefonía celular o llamando al *910 desde cualquier teléfono. Automáticamente, según el artículo 5 de la resolución 2459/2016 del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), la empresa que recibe una denuncia por robo, hurto o pérdida de un móvil tiene que bloquear la línea telefónica (puede desbloquearse en caso de tener que usarla con otro dispositivo) y el IMEI.
El IMEI (International Mobile Station Equipment Identity en inglés) es un código de 15 dígitos pregrabado por el fabricante para identificar cada equipo móvil. Este código identifica al dispositivo a nivel mundial. Estos IMEI están compuestos por un código de identificación de marca y modelo otorgado a los fabricantes a nivel mundial por la GSMA (Global System Mobile Association).
El principal motivo por el cual se bloquea el IMEI es para hacer frente a la problemática del robo de celulares y delitos derivados. Se bloquea cuando se realiza una denuncia por robo, hurto o extravío de parte del dueño del equipo a la empresa que le provee el servicio.
Para sumar un plus a la seguridad de tus cuentas, al margen del bloqueo total de tu teléfono, el usuario puede acceder desde otro dispositivo o desde una computadora a las cuentas de las aplicaciones que tenga instaladas en el celular y cambiar las contraseñas.
Si el celular se bloquea por completo, puede volver a restablecerse, por lo que no hay ningún peligro en proceder de esta manera.