LA PAMPA.- Los policías pampeanos que sean denunciados por violencia de género o intrafamiliar deberán entregar su arma reglamentaria.
Así lo dispuso el gobernador Sergio Ziliotto a través de un decreto.
En diciembre pasado, ya el Gobierno nacional promovió la restricción de portación de armas para el personal de fuerzas de seguridad que haya sido denunciado por violencia de género.
El decreto dispone además que los policías deberán entregar el arma "cuando revistan en situación de pasiva, sin distinción de causa o motivo y encuadre legal de la misma; cuando revistan en disponibilidad a excepción del supuesto previsto en el inciso 1) del artículo 119 de la Norma Jurídica de facto Nº 1034/80; y en caso de existir afecciones psicológicas y/o psiquiátricas previa certificación emitida por profesional competente".
Finalmente, establece que la jefatura de Policía, a través de la dependencia competente, procederá a la inmediata retención del arma reglamentaria en caso de incumplimiento del deber del efectivo policial, y que se procederá a su reintegro una vez que cese la situación que motivó el retiro, previa intervención con informe favorable de Servicio Social D-1 y/o Servicio Médico Policial, según cada caso en particular lo amerite.