13 Febrero 2021
Los debuts de los últimos cinco técnicos que tuvo Atlético tienen dos características similares. La primera es que ninguno perdió. La segunda es que todos, tal vez sin saberlo, compartieron un amuleto de la suerte.
En abril de 2014, Atlético deambulaba en el Nacional “B” y Héctor Rivoira comenzaba su segundo mandato como técnico del “Decano”. Su primer partido fue con el amuleto de la suerte como titular y su equipo ganó 3-0 en Tucumán a Douglas Haig. “Chulo” no terminó el torneo, que fue recordado por los 10 ascensos a Primera. Y luego de algunos malos resultados renunció. El que se hizo cargo del equipo fue Juan Manuel Azconzábal, actual técnico de Unión. El 14 de noviembre de ese mismo año, el “Vasco” dirigió su primer partido fue 0-0 con Patronato y estuvo al mando del “Decano” hasta finales de 2016. Tomó al equipo en el Nacional “B” y lo llevó hasta la Copa Libertadores de América.
En enero de 2017 y en un torneo internacional se produjo el debut de Pablo Lavallen en el banco, con un histórico 2-2 frente a El Nacional de Ecuador. La floja cosecha de puntos en el torneo local decantó en la llegada de Ricardo Zielinski, que en su primer partido empató con Patronato 1-1.
La llegada de Omar De Felippe pareciera ser una continuación de un proyecto que comenzó hace cuatro años con el “Ruso”. Apenas aterrizó en Tucumán el técnico fue claro. “Vengo a potenciar al equipo”, dijo el DT, que anoche estuvo cerca de debutar con triunfo: fue 2-2 con Unión.
Luego de conocer al plantel el entrenador redobló la apuesta. “Me gustaría salir campeón”, declaró antes de viajar a Santa Fe.
Las salidas de Jonathan Cabral y Lucas Melano, no afectaron la tranquilidad del DT que al parecer, apostará fuerte por los juveniles. Aunque Marcelo Ortiz se recuperó de su desgarro, Agustín Lagos se ganó la titularidad tras el buen partido que hizo frente a Estudiantes. Kevin Isa Luna convenció al técnico que puede ser titular. Gabriel Risso Patrón le ganó la pulseada a Fabian Monzón, que se sumó tarde a los entrenamientos. Ramiro Ruiz Rodríguez es el primer cambio del equipo.
“Constantemente nos ofrecen jugadores, pero el que tiene la última palabra es De Felippe”, dijo Miguel Abbondándolo. De una larga lista de nombres que recibió el DT, el único que tuvo el visto bueno fue Santiago Vergini. Y el central devolvió gentilezas al entrenador convirtiendo un gol en su debut.
En los últimos años, los hinchas y los dirigentes supieron “bancar” el proyecto elegido, los técnicos pudieron trabajar a gusto en un club ordenado. Aunque todos contaron con la ventaja de tener un amuleto en el plantel: Guillermo Acosta, que llegó en silencio desde San Jorge y poco a poco se convirtió en pieza clave. Pasaron los técnicos y “Bebé” siempre jugó. Anoche sobre el final se escapó el triunfo, pero las sensaciones que dejó el equipo fueron buenas. (Producción periodística de Daniel Coronel)
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