Los colegios privados ya están listos para recibir a los alumnos

Aunque todavía esperan un protocolo provincial definitivo, los colegios privados de Tucumán han comenzado a prepararse, desde el año pasado, para la presencialidad. Se inspiran en los lineamientos propuestos para la elaboración de un protocolo emanado del Consejo Federal de Educación y avanzan en capacitación y, algunos, en la elaboración de un posible protocolo adaptado a la realidad de cada colegio, según la cantidad de alumnos y espacios para garantizar el distanciamiento social. Estos protocolos son provisorios hasta que el Ministerio de Educación de la Provincia emita una resolución o se apruebe un protocolo provincial.

Cada conjunto de medidas difiere de acuerdo al colegio en días de presencialidad, materias que se van a dictar en una u otra modalidad -presencial o virtual- y en la extensión de la jornada escolar. Veamos tres ejemplos: Sagrado Corazón, Santa Rosa y Peter Pan.

“Estamos esperando el protocolo, pero mientras tanto, ya hemos acondicionado la escuela y tenemos previsiones: el 50% de los alumnos retomará la presencialidad tres días a la semana -lunes, miércoles y viernes - y el otro 50% lo hará martes y jueves. Los días que no vengan al colegio, seguirán las clases de manera virtual desde sus casas. A la semana siguiente, el grupo que tuvo tres días de presencialidad tendrá dos, y tres días en forma virtual. Y así irán alternando, explica Norma Macció, directora del colegio Sagrado Corazón.

Ayer, muchos colegios dictaron capacitación virtual a sus docentes, no docentes y directivos. Si bien, en lo formal, los docentes no se reincorporaron aún a la actividad (porque cayó el calendario escolar 2020-2021 por resolución del 5 de febrero), la capacitación ya estaba prevista desde mucho antes, explicaron los directores. “No podemos dejar que se nos acumulen tanto las tareas, tenemos que avanzar en la organización”, dijeron.

En el Sagrado Corazón obreros trabajaban en construir dos quioscos más, que se sumarán al que ya había, para evitar las típicas aglomeraciones escolares en la cantina. El recreo seguramente será más largo que el normal porque habrá que esperar que los chicos coman lo que compraron en el quiosco antes de entrar, se saniticen e ingresen al aula en forma ordenada y con distancia de sus compañeros, explica Macció.

También se ampliaron los espacios para dictar clases. A las aulas se suman el laboratorio, la biblioteca y el museo para dictar clases. En cada grupo no habrá más de 15 o 20 alumnos, que entrarán por una puerta y saldrán por otra. El ingreso y la salida escalonado previeron los colegios.

“Todas estas medidas las diseñamos en base a suposiciones, de lo que escuchamos del ministro Nicolás Trotta y a lo que vemos de los protocolos de Capital Federal y de otras provincias”, cuenta Macció. Un detalle a destacar es que el docente dictará una sola clase tanto para los chicos que estén en el aula como para los que estarán conectados desde sus casas. Ambos grupos podrán verse a través de una pantalla gigante.

En el Santa Rosa, en cambio, la presencialidad tendrá un sentido más vincular, por eso los grupos de virtualidad y presencialidad no compartirán la misma clase, sino que tendrán contenidos específicos, dice Valentina Nougués, integrante del Comité de Emergencia del colegio, que se formó apenas comenzó la cuarentena. “Trabajamos para el regreso dentro de políticas de cuidado y nos capacitamos toda la comunidad”, afirma la representante legal Graciela Daives de Marcotullio. El edificio luce empapelado con las medidas de prevención y los pisos están alfombrados con señalética. “Tenemos un plan A, un plan B y un plan C. Es decir, armamos distintos escenarios para adaptarnos a todas las medidas que surjan desde el Ministerio de Educación de la Provincia”, remarca Nougués. La política de cuidado del colegio se basa en acciones preventivas a partir de cinco pilares: infraestructura, higiene y cuidado, comunidad y bienestar, comunicación fluida y continuidad del aprendizaje.

En el colegio Peter Pan el camino hacia la presencialidad está en marcha. Natalia María Reinoso Martín, la directora, explica que dentro de sus previsiones se piensa en dividir cada grado en dos grupos, A y B. Tendrían dos jornadas presenciales y dos virtuales, por semana, y un quinto día para desinfección total. Se privilegiarían para la presencialidad las materias troncales como Lengua, Matemática, Ciencias Naturales y Ciencias Sociales, lo demás se daría en forma virtual. Pero todo está a nivel de supuestos y a la espera de que el Ministerio defina en estas dos semanas el destino de la educación.

SADOP: “Urge que se apruebe el protocolo”

“Estos días se está produciendo una fuerte tensión entre los empleadores y los docentes, y tiene que ver con la falta de un protocolo de vuelta a la actividad. Urge que el Gobierno lo apruebe”, afirmó ayer Bernardo Beltrán, titular de Sadop. 

“En general la docencia quiere recuperar presencialidad, con los límites que marca el escenario epidémico y los empleadores están ansiosos por organizar el funcionamiento escolar por la cercanía de la fecha de probable inicio. Nosotros queremos que se cumpla la norma, pero es imperioso que haya una normativa hacia la presencialidad posible. Falta la decisión provincial”, dijo.