Doble homicidio en el parque: “No saben lo que es llevar cartas al cementerio”

“Nos están dilatando de nuevo el inicio del juicio. Estamos en la última instancia ya. En diciembre estaba todo listo, nos habían dicho que se resolvería el caso con un juicio abreviado que veríamos por videoconferencia, pero a último momento nos avisaron que se suspendía porque los abogados del acusado habían renunciado”, lamentó Carina Olea, la viuda de Sergio Páez González uno de los efectivos que fueron asesinados en 2018 en el parque 9 de Julio. La otra víctima, fue el policía Cristian Peralta. Por el doble homicidio se detuvo a Máximo Alejandro Abraham, quien permanece con prisión preventiva.

“Nuestro nerviosismo es porque el 15 de marzo se cumplirá una vez más el plazo de la preventiva y hasta el día de hoy no sabemos nada. El lunes se termina la feria y aún no sabemos qué pasará, sí habrá fecha de juicio antes de que Abraham quede libre, o si se puede pedir una nueva prórroga”, agregó Olea, que desde hace tres años lleva el duelo y la querella junto con Noelia Ferez, viuda de Peralta.

La mujer le adelantó a LA GACETA que tiene la intención de convocar a una misa frente al Fuero Penal de Tribunales para el 12 de febrero, por el aniversario de las dos víctimas. “No queremos cortar la calle ni molestar a terceros. No es nuestro estilo. Pero sí queremos que sea en la vereda, queremos que los jueces se apiaden de nuestras familias. Estamos cansados de que nos toquen la herida. Son tres años ya que lo pasamos terrible, a la espera de un juicio que no llega”, explicó la mujer con la voz afectada por el mal momento.

“No tienen idea lo que es llevar cartas al cementerio y explicarle a tu hija que su papá ya no está. Como esposa uno sufre, pero lo que viven los chicos es terrible. Mi nena de 7 cumple años el 19 de febrero, todos los 13 lleva cartas y dibujos a la tumba de mi marido pidiéndole que la cuide”, concluyó Olea al borde de las lágrimas. El doble homicidio dejó en total a a nueve hijos huérfanos de padre.

“No hay más margen”

Jorge Lobo Aragón, abogado querellante de la causa, explicó que el ex defensor de Abraham había solicitado un juicio abreviado. “Si se daba esa posibilidad, era bajo la condición de que aceptara 34 años de prisión como pena, o bien afrontar el juicio oral. Ellos pidieron el abreviado pero a último momento parece que se retractaron. Los abogados renunciaron y ahora corresponde que el acusado nombre un nuevo profesional o bien se le provea un defensor público, pero el juicio debe comenzar ahora. No hay más margen para postergarse. La preventiva, que ya fue muchas veces prorrogada, vence a mediados de marzo”, informó Lobo Aragón en entrevista con nuestro diario.

El hecho

El 13 de febrero de 2018, Peralta y Páez González recorrían el parque 9 de Julio en una patrulla del 911. En determinado lugar del pulmón, notaron una camioneta estacionada en medio de la oscuridad. Al acercarse al vehículo, un hombre salió de la cabina y comenzó a dispararle a los efectivos, que terminaron falleciendo en el lugar. El atacante estaba acompañado por una mujer trans que presenció la matanza y se convirtió en testigo clave para la Justicia.

La captura

Tras varias medidas de allanamiento ordenadas en la provincia, Máximo Abraham fue detenido cuando caminaba por las calles de El Manantial. La fiscala María del Carmen Reuters fue consiguiendo pruebas con las cuales imputó y procesó al acusado. El caso tuvo algunas particularidades: se conoció que el asesino de los policías era un buen tirador, una persona con instrucción en el uso de armas de fuego; por otro lado, testigos aseguraron que el acusado sabía utilizar las armas. Otro detalle: el acusado habría intentado deshacerse de la camioneta en la que se habría movilizado el día del crimen. Por último, la testigo había referenciado a los investigadores que el autor el hecho contaba con un rasgo físico que sería determinante para la detención de Abraham.

Marcha por la inseguridad: cruzaron el microcentro recordando a las víctimas

Decenas de personas se congregaron en la esquina de avenida Sarmiento y Muñecas, sobre plaza Urquiza. Con carteles referidos a Alejandro Sánchez y a Daniel Moalla, cruzaron el microcentro recordando a distintas víctima de la inseguridad en la provincia. La marcha, que fue acompañada por bicipolicías de la Guardia Urbana, concluyó frente a la Casa de Gobierno, donde esperaba un operativo policial. “Pedimos que nos acompañen para que podamos caminar tranquilos por nuestra provincia”, se escuchó por el parlante de los manifestantes.