Febrero comenzará con un acontecimiento político particular. La Legislatura de la Provincia reclamará una ley nacional. Y todo parece indicar que lo hará por unanimidad.
Los presidentes de los bloques del oficialismo y de la oposición, como lo anticipó ayer LA GACETA, acordaron ayer, en la reunión de Labor Parlamentaria que comenzó a las 11, que sesionarán el próximo lunes. La cita será al mediodía. Y en esa primera deliberación extraordinaria del año (según la Constitución provincial, el período de sesiones ordinarias comienza el 1 de marzo), solicitarán al poder político federal que prorrogue la Ley 26.093.
Se tratará de una sesión especial, además, porque el único tema a debatir será la prórroga de esa norma, que establece el Régimen de Regulación y Promoción para la Producción y Uso Sustentables de Biocombustibles en la Argentina.
La legislación en cuestión fue sancionada por el Congreso el 12 de mayo de 2006. Ese sistema de promoción de los biocombustibles, de acuerdo con el artículo uno, “tendrá una vigencia de 15 años a partir de su aprobación”. Es decir, en mayo próximo habrá concluido.
“Si no hay una extensión de ese régimen, este mismo año, en la zafra 2020-2021, los ingenios de Tucumán no van a producir alcohol. Así que esa ley es una cuestión de vital importancia para nuestra industria sucroalcoholera y para las economías regionales de todo el Noroeste Argentino”, subrayó ayer a LA GACETA el vicegobernador Osvaldo Jaldo. Insistió con que la actividad genera casi 60.000 puestos de trabajo directos y prácticamente 150.000 indirectos.
El presidente de la Legislatura hizo hincapié, además, en que la prórroga de la Ley 26.093 también le atañe de manera directa a la región del Centro, que componen Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, La Pampa y Buenos Aires. “La norma regula los biocombustibles en nuestro país. Esto tiene que ver tanto con el bioetanol, que se produce a partir de la caña de azúcar, como con el biodiesel, que se fabrica sobre la base del maíz que produce la Pampa Húmeda”, describió.
Aunque ayer estuvo interinamente a cargo del Poder Ejecutivo, Jaldo participó de la Labor Parlamentaria, que fue conducida por el presidente subrogante de la Legislatura, Regino Amado.
Precios y compromisos
En el diálogo con este diario, el vicegobernador reivindicó la necesidad de que se prorrogue la Ley 26.093 sobre la base de dos argumentos centrales.
Uno, de índole macroeconómica, consiste en que si la ley caduca, los ingenios no producirán alcohol. Consecuentemente, la totalidad de la producción de caña de Tucumán (así como las de las demás provincias azucareras) se destinará exclusivamente a la producción de azúcar. Ello sólo redundará en una saturación del mercado y, ante la sobreabundancia de la oferta, depreciará severamente el valor del producto. Es decir, el azúcar tendrá un precio tan bajo que ni siquiera alcanzará para cubrir los costos que demanda su producción. Dicho en otros términos, un precio de quebranto.
Por otro lado, en términos microeconómicos, el presidente de la Legislatura puntualizó que hay una serie de compromisos que ya ha contraído la industria sucroalcoholera de la región que, irremediablemente, serán incumplidos si el Gobierno nacional no prórroga el Régimen de Regulación y Promoción para la Producción y Uso Sustentables de Biocombustibles.
“En la actividad hay inversiones a mediano y largo plazo. Y, por supuesto, también hay contratos comerciales de mediano y largo plazo”, hizo hincapié.
Dos destinatarios
La resolución que adoptará el lunes la Legislatura constará de dos elementos centrales. El primero de ellos solicitará al Congreso de la Nación que, mediante otra ley, prolongue el régimen promocional de los biocombustibles en la Argentina.
Ciertamente, la principal destinataria de ese requerimiento será la Cámara de Diputados de la Nación. El 30 de octubre del año pasado, el Senado de la Nación dio media sanción por unanimidad al dictamen que prorroga la Ley 26.093 hasta el 31 de diciembre de 2024. La norma fue impulsado por los oficialistas María de los Ángeles Sacnun (Santa Fe) y Sergio Leavy (Salta) y por los opositores Mario Fiad (Jujuy) y la tucumana Silvia Elías de Pérez.
Sin embargo, y a pesar de la inminente caducidad de la norma nacional, está no ha sido llevada aún al recinto de la Cámara Baja. Incluso, los diputados nacionales han sido convocados a sesiones extraordinarias para este año sin que la prórroga de la Ley 26.093 esté incluida en alguna orden del día.
La iniciativa que cuenta con el aval de la Cámara Alta prevé beneficios impositivos para los productores de las 54 plantas productoras de biocombustibles (entre bioetanol y biodiesel) de la Argentina, distribuidas en 10 provincias.
El segundo elemento de la resolución que sancionará la Legislatura consiste en pedirle al presidente Alberto Fernández que, si eventualmente la Cámara Baja no está dispuesta a prolongar los beneficios del régimen promocional, él personalmente se encargue de dictar la prórroga por dos años. Esa facultad está prevista para el mandatario nacional en la propia Ley 26.093.
Jaldo, finalmente, destacó también la faz ambiental del fomento de los biocombustibles en la Argentina. Destacó que se trata de “combustibles verdes”, que no contaminan y que se producen a partir de recursos renovables, como los cultivos. Agregó que diversifica la matriz de producción de energía de la Argentina, y que da participación a más provincias en la actividad.
Por 200.000 empleados: Fotia también se suma a las demandas
“Eludir o dilatar su prórroga pone en serio riesgo el sostén económico de una actividad que emplea a más de 200.000 empleados”, dice Roberto Palina, secretario general de Fotia, en una nota dirigida a los presidentes de bloque de la Cámara Baja. “Los representantes del pueblo tienen el mandato de velar por el progreso de sus representados, de los cuales casi un 50% se encuentran sumidos en la pobreza y necesitan abrir fuentes de trabajo, no cerrarlas”, señaló el legislador. La de Fotia se suma a las varias iniciativas pidiendo la sanción de la prórroga hasta el 31 de diciembre de 2024 del "Régimen de Promoción para la Producción y Uso Sustentables de Biocombustibles en el territorio de la Nación Argentina". Por esa norma se dispuso la mezcla de biodiésel de soja en el gasoil (10%) y del etanol de caña y maíz en las naftas (12%).