El tenis: un deporte físico y social

Correr, nadar, caminar, practicar autodefensa. Venimos hablando de los beneficios que los diferentes deportes provocan en quienes los practican y de la importancia de la actividad física en las diferentes edades.

Si bien parece solitario cuando se juega de a uno, el tenis es un deporte muy social y requiere de la máxima concentración y respuesta del jugador. Suele comenzar a practicarse desde niño, lo que activa la función estratégica temprana, los reflejos, la respuesta y la conciencia sobre el entorno.

Entre otras cosas, practicar este deporte fortalece los huesos y el corazón; agudiza la coordinación motriz; desarrolla la velocidad y la flexibilidad; y mejora el equilibrio.

Por hobby o por profesión, sus adeptos son cada vez más. La actividad no discrimina edades, lo que permite que niños o adultos, mujeres u hombres, se enfrenten en modalidad single o doble, sobre diferentes suelos.

En Tucumán, son varios los clubes que dan clases de tenis y también que alquilan las canchas a particulares que quieren aprovecharlas durante una o varias horas seguidas.

No hace falta que entrenes como Del Potro para entrar por primera vez a una cancha. La actividad permite que desde el más nuevo hasta el más experimentado, disfrute de un partido por igual. Basta con tomar la raqueta y meter el primer saque para que la adrenalina invada el cuerpo.