“El maíz es fundamental en el sistema productivo del NOA y ahora peligra”

“La medida de fuerza sigue firme. Los productores no bajaremos los brazos”, avisó a LA GACETA Roberto Palomo, vicepresidente la Asociación de Productores y Ganaderos del Norte (Apronor), sobre el cese de comercialización de granos que el sector implementará desde el lunes. “No moveremos nuestra postura hasta que en el Boletín Oficial se reabran los registros de exportación de maíz”, completó. El Gobierno nacional analizaba revertir la medida que detonó el paro agropecuario, pero hasta anoche no se comunicaron novedades.

“Absoluto silencio”, definió al respecto Sebastián Murga, titular de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT). En caso de que el Ministerio de Agricultura no dé marcha atrás con la suspensión de las exportaciones de maíz en las próximas horas, la medida de fuerza comenzará “con gran adhesión”, dijeron los referentes del campo. “Y si no hay cambios hasta el miércoles, anunciaremos la extensión del cese en el Norte porque 72 horas son insuficientes. Aquí el impacto es mayor y nadie quiere vender mientras dure esa medida”, advirtió Palomo.

El jueves, el Gobierno mantuvo negociaciones con representantes del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) para destrabar el conflicto bajo la condición, por parte del sector, de “garantizar el abastecimiento interno y mitigar los efectos de cambios bruscos que impactan en el consumo”. Justamente, uno de los argumentos del ministro Luis Basterra para suspender hace semanas las exportaciones de maíz hasta marzo fue la de asegurar la provisión del grano a un precio menor mientras los valores internacionales van en aumento. El martes, la mayoría de la Mesa de Enlace anunció el paro del agro en rechazo a la iniciativa.

“El CAA no tiene representatividad; no son parte del sector. No pueden decir que asegurarán la provisión de maíz porque somos nosotros los que producimos, ellos industrializan. Son puestas en escena para hacer creer que se destraba el conflicto”, consideró el directivo de Apronor.

El impacto productivo

En un comunicado, la entidad agropecuaria ya había advertido que el cierre de las exportaciones de maíz tienen efectos negativos mayores en el Norte. Gonzalo Blasco, productor del grano en Tucumán y Santiago del Estero, explicó a LA GACETA cómo le afecta la medida del Gobierno. “El maíz es un eslabón fundamental en el sistema productivo de la región y ahora peligra”, resumió al iniciar la entrevista.

¿Por qué? “Es el cultivo que nos da cobertura a los suelos para que conserve la humedad ante la insolación y las altas temperaturas propias del NOA. Se podría conseguir la cobertura con otros cultivos, como el sorgo, pero este va en su totalidad al puerto. En cambio, una gran parte del maíz tiene consumo local para producir proteínas animales”, explicó el productor tucumano.

Luego, alertó que la iniciativa oficialista compromete las próximas campañas de maíz (la actual está finalizando). “En el corto plazo, se dará el efecto contrario al buscado por el Gobierno: como no se venderá, el precio subirá. Y si se mantiene la restricción en el tiempo, en el Norte puede disminuir la superficie cultivada y nos quedaremos sin una herramienta fundamental para mantener el sistema productivo. Fomentan la sojización”, protestó Blasco.

“La medida rebalsó el vaso. Hay evidente intencionalidad de complicar a los productores, entre la nueva Ley del Fuego, el aumento de las retenciones y la suba de impuestos. El paro podría extenderse”, finalizó el agricultor.