Con la asunción de los diputados electos el mes pasado, el oficialismo chavista recuperaría mañana el control y la mayoría de los cinco poderes públicos de Venezuela, después de que la Asamblea Nacional (AN, parlamento) estuviera en manos de la oposición durante el último quinquenio.
Tras el holgado triunfo chavista en las elecciones del 6 de diciembre, a las que no concurrió la mayoría de la oposición y en las que el oficialismo ganó no solo la mayoría simple sino además las dos mayorías calificadas necesarias para aprobar ciertos tipos de leyes, la incógnita a despejar es quién presidirá la AN desde mañana.
El período posterior a los comicios dio lugar a una dura competencia por ese puesto entre el ex ministro Jorge Rodríguez -una de las figuras más próximas al presidente, Nicolás Maduro- y el número dos del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) gobernante, el capitán Diosdado Cabello.
Tres fuentes políticas arriesgaron que Rodríguez llega con ventaja y que Cabello quedará probablemente como jefe de la bancada oficialista, aunque advirtieron que el tema aún no estaba resuelto.
No obstante, la recuperación del control parlamentario por parte del oficialismo no es "cosa juzgada", por cuanto el sector mayoritario de la oposición, que desconoció los comicios de diciembre, resolvió extender el mandato de los legisladores actuales hasta que haya elecciones que consideren libres.
Por lo tanto, la mayoría de la oposición mantendría una suerte de parlamento paralelo que dará cierto sustento político a la prolongación del Gobierno interino encabezado por Juan Guaidó y designado por la AN en 2019, tras desconocer también las elecciones en que Maduro fue reelecto en 2018, por considerar que fueron irregulares.
Al respecto, varios de los cerca de 60 países que consideran presidente de Venezuela a Guaidó ya anticiparon su desconocimiento a la AN que asumirá mañana, entre ellos Estados Unidos, que es el principal sostén económico del Gobierno paralelo opositor y mantiene bloqueado dinero del Estado venezolano en su país y sanciones para casi toda la primera plana chavista.
La continuidad de la AN actual fue declarada nula por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) el 30 de diciembre, un día después de que Maduro advirtió que no le temblará el pulso para actuar férreamente frente a estas ínfulas de autoproclamación y de extensión ilegal e inconstitucional de supuestos mandatos. (Télam)