Cientos de militantes que rechazan la legalización del aborto esperaban en la avenida Sarmiento al 500 el resultado de la maratónica sesión en el Senado. Un escenario montado frente al edificio de la ex Brigada, que incluyó una pantalla gigante de transmisión, fue utilizado por numerosos oradores -profesionales, religiosos y particulares- para expresar su repudio a la iniciativa legislativa por la interrupción voluntaria del embarazo. “No nos iremos de la plaza Urquiza hasta el final del debate”, anunció Mariela Reche, una de las organizadoras del acto y el acampe “celeste” de anoche en barrio Norte. Según su conteo, llegó a haber 5.000 asistentes en la convocatoria.
Uno de los primeros discursos estuvo a cargo de miembros de la organización “Médicos por la Vida”. Graciela Luna Ocampo, Viviana Crivelli, Gisela García y Jorge Valdecantos denunciaron que el proyecto de ley “es uno de los más despiadados del mundo” en la materia y que establecerá un “aparato de persecución” en contra de los profesionales que se nieguen a practicar abortos. Por el escenario también pasaron abogados, docentes, contadores y cantantes. Además, con videos repasaron los sucesos de 2018, año en el que la Cámara Alta votó en contra de la reforma. En los intervalos, los cánticos y las batucadas de agrupaciones jóvenes coparon el norte de la plaza. En la acera sur, en cambio, un grupo de religiosos oraba en voz baja con imágenes de la Virgen María.
“Creo que es importante estar esta noche porque es un signo político. Es dar un mensaje, más allá de los resultados, en defensa de la vida por nacer y la dignidad de la mujer. El aborto no es una solución”, expresó a LA GACETA María Laura Toledo, docente universitaria en Formación Humanística. “Un gran porcentaje de la población quiere que se defienda la vida, como dice la Constitución”, añadió.
El ingeniero Ignacio Contino, profesor de Física, acusó que en la comunidad científica argentina hay una posición generalizada a favor de la legalización del aborto “por agenda política”. “El asesinato no puede ser legal ni un derecho”, dijo en consonancia con los eslóganes de la manifestación.