26 Diciembre 2020
FOTO / TW @BelenGuzman69
Pese a las últimas normas sancionadas por la Legislatura de Tucumán y a que cientos de movimientos y organizaciones se expresan cada año fervientemente el contra del uso de pirotecnia ruidosa, la Navidad de 2020 no fue la excepción. Una vez más, muchas familias tucumanas decidieron celebrar con distintos tipos de cohetes. Y, mientras algunos se divertían, otros pasaron un mal momento.
La fuerza del sonido que provocan las explosiones afecta directamente a personas con distintos tipos de hipersensibilidad sensorial, ejemplos de ello son las personas cuya condición se encuentra dentro del espectro autista.
Pero también impacta fuertemente en la salud y seguridad de los animales, quienes, al tener un oído considerablemente más sensible que el de los seres humanos este tipo de explosiones no solo los estresa y angustia, sino que les pueden afectar severamente su capacidad auditiva.
EN BÚSQUEDA DE REFUGIO. Muchos animales sufren el ruido de la pirotecnia y huyen de sus hogares. FOTO / TW @BelenGuzman69
Como era de esperarse, muchos perros y gatos no soportaron la ansiedad y huyeron despavoridos de sus hogares buscando refugio del ruido. Eso provocó además la aflicción y tristeza de sus dueños, quienes hoy sufren por no encontrarlos.
Esa situación, ver a sus mascotas en crisis por el uso de la pirotecnia, fue lo que impulsó a Belén Guzmán, una emprendedora y estudiante de psicología, a impulsar una campaña en las redes para limitar el uso de la pirotecnia y para encontrar animales perdidos tras los festejos de navidad.
Así fue como la universitaria de 21 años decidió armar un “hilo”en Twitter (@BelenGuzman69) para que se sumen la mayor cantidad de personas que hayan extraviado a sus mascotas. Y, según reveló en un tuit, "son más de 200 perritos" los que pudo relevar como perdidos.
“Mi postura, como la de muchos tucumanos, es totalmente en contra de la pirotecnia ya que para muchos 'festejar' se trata de encerrarnos en una habitación con música relajante tratando de calmar a nuestras mascotas, a nuestros hijos o familiares que no la toleran”, comentó la joven.
“Todo es lamentable. Tener que difundir a más de 150 animalitos perdidos es terrible, la pirotecnia en animales pueden causarles pánico y provocar conductas no habituales como escapar sin rumbo y perderse, lastimarse, o lastimar a las personas”, explicó.
Belén tiene una sensibilidad particular con los animales, por eso ha dedicado gran parte de su vida a su protección y rescate.
RESCATE. La tucumana dedica gran parte de su tiempo a asistir a animales en peligro. FOTO / BELÉN GUZMÁN
“En esta tarea, para la que se necesita tanta fortaleza y dedicación y que no tiene feriados ni horarios, contar con el apoyo, la colaboración y especialmente la empatía de la gente es una necesidad. Tanto en pequeñas cosas como donaciones, tránsitos, difusiones como así también cumpliendo nuestro rol dueños responsables, protegiendo, atendiendo y castrando indiscutiblemente a nuestros animales”.
Por su parte, aprovechó la oportunidad para pedirle a la comunidad seguir exigiendo a las autoridades una ley de castraciones masivas, tenencia responsable de animales y "Pirotecnia Cero" en Tucumán.
Este año, la Legislatura sancionó una norma que establece la prohibición de ciertos tipos de pirotecnia sonora. Además, en algunos municipios directamente está vedada la utilización de cohetes. Las disposiciones, sin embargo, parecen no haber alcanzado su cometido en su totalidad.
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