Por Álvaro Medina
13 Diciembre 2020
GENERAL ROCA. El clima es un factor decisivo, hoy el cielo amaneció despejado y eso los mantiene en alerta aún más. LA GACETA / FOTO DE ALVARO MEDINA
No solo el extraordinario eclipse total de sol previsto para este lunes inquieta a los expedicionarios. A la gran mayoría los fascina la contemplación del universo en su conjunto. En los diálogos subyace la curiosidad por lo infinito, la comprensión de nuestra propia finitud, la sed de conocimiento. Son esas motivaciones las que parecen haberlos empujado hasta el sur del país para coincidir en un fenómeno astronómico de características históricas.
La zona de observación no es un detalle menor dentro de la escena en la que se desarrollará el suceso. Deberán sumergirse en el desierto, en la indómita estepa patagónica, resguararse de los fuertes vientos y el sol, hacerle frente a la inmensidad también en la tierra.
En la base ubicada en general Roca, el grupo espera ansioso. Mañana es el día definitivo. El clima es un factor decisivo, hoy el cielo amaneció despejado y eso los mantiene en alerta aún más. Prevén un cielo similar para el lunes, en el horario del eclipse, pero son cautos y no aseguran pronósticos.
Las horas corren y la emoción crece en la previa de este eclipse total de sol que promete ser sublime. Los expedicionarios ya hicieron sus cálculos y barajan sus espectativas: unos revisan sus telescopios para estudiar el fenómeno, otros acondicionan sus cámaras y lentes especiales, algunos solo desean presenciar el hecho sin importar el registro. Todos, en definitiva, se preparan para recibir esta expresión del universo y dialogar con lo infinito.
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